Marchena aún no forma parte de la comunidad de energía «toda Sevilla» que cuenta ya con 32 ayuntamientos adheridos y la ayuda de la Cámara de Comercio de Sevilla, que pretende generar su propia energía eléctrica renovable y de esta forma que los vecinos de los pueblos inlcuídos paguen menos en su factura eléctrica.
La Cámara de Comercio de Sevilla aporta el personal técnico y la cobertura jurídica para extenderse a toda la provincia.
Cada municipio, en función del porcentaje de participación que tenga paga un valor de cuota generando un valor de kilowatios cada hora y la cuantía final se comunica a la comercializadora con la que tiene contrato el socio y se la descuenta íntegramente del consumo que haya tenido, dejando un neto de energía que es el que le facturaría la comercializadora al precio que tenga estipulado por su contrato.
El Ayuntamiento de Marchena se ha adelantado en este año preelectoral y ha comenzado hoy a instalar el alumbrado navideño, tal y como muestra esta imagen de la Plaza de Alvarado, calle Rojas Marcos que está aún en obras. En el último pleno se aprobaron dos partida de 30.000 euros para las fiestas de Navidad que este año se pretende recuperar tras la pandemia. Antes de la pandemia el mapping del Arco de la Rosa era la atracción estrella que se dejó de hacer por el Covid.
Los kilowatios comprados a la comercializadora fluctúan de precio y tienden a subir, pero los generados por el sol en «su parte» de placa fotovoltaica, son tarifa plana.
Por el momento son El Real de la Jara, Bollullos de la Mitación, Carrión de los Céspedes, Coria del Río, San Juan de Aznalfarache, El Cuervo, Cazalla de la Sierra, Las Navas de la Concepción, Alcalá del Río, Alcolea del Río, Brenes, Guillena, La Rinconada, La Algaba, Cantillana, Lora del Río, Peñaflor, Tocina, Villanueva del Río y Minas, Villaverde del Río, Cañada Rosal, Carmona, Écija, El Viso del Alcor, Fuentes de Andalucía, La Campana, La Luisiana, Mairena del Alcor, Arahal, Herrera, Estepa y Osuna.
La finalidad es que los ciudadanos residenciales, empresas y la propia administración, de forma individual o colectiva, generen su propia energía, eso sí, de origen renovable y la puedan autoconsumir, incluso compartir usando la red eléctrica general, sin que tengan obstáculos legales ni impedimentos por parte de las comercializadoras y las distribuidoras de energía y donde, y esto es base fundamental y se repite en todos los escritos, las administraciones locales tienen un papel principal, protagonista, impulsando y facilitando el desarrollo de CELs desde la participación activa y por la disponibilidad de espacios para hacer las inversiones en infraestructuras de generación: cubiertas, suelos, subsuelo.
«Existen vecinos que, por la tipología de su vivienda o por la inversión que requiere no pueden instalar placas fotovoltaicas, pero con esta opción pueden adherirse a las Comunidades de Energía Local y así aliviar el importe de la factura” exoresa el presidente del DGR Gran Vega, Juan Carlos Expósito.
Esas Comunidades Energéticas Locales (CELs) tienen personalidad jurídica propia y son las que acometen las diferentes inversiones en instalaciones, placas y demás necesidades derivadas del servicio, repercutiendo a sus asociados los costes que ello conlleva.