El fiscal de la Inquisición de Sevilla ordenó prisión y multa contra el vecino de Osuna, Antonio Cordero músico del regimiento de Marina que se casó por tres veces sin separarse ni anular sus anteriores matrimonios por lo que el delito que se le imputó fue triple matrimonio. Se casó una vez en Zafra de donde huyó, y dos veces en Cádiz. Finalmente volvió a Osuna y fue encarcelado en Marchena donde confesó sus delitos.
FUENTE: Alegación fiscal del proceso de fe de Antonio Cordero, músico del Regimiento de Marina, originario de Osuna, seguido en el Tribunal de la Inquisición de Sevilla, por triple matrimonio. INQUISICIÓN,3723,Exp.161.
Antonio Cordero estaba ya retirado de su vida aventurera en Osuna ejerciendo como Sastre cuando fue acusado por su última mujer. La Inquisición procede contra el por triple matrimonio y es enviado a prisión en cárceles secretas con embargo de bienes.
Su fiebre matrimonial comenzó el 6 de mayo de 1800 cuando se casó en la Iglesia Colegial de la villa de Zafra, Extremadura previos consentimientos paternos y disposiciones del Concilio de Trento. Antonio Cordero era hijo de Javier Cordero y Justa Rodríguez. Se casó en Zafra con Teresa Díaz hija de Pedro Díaz naturales y vecinos de aquella villa de Zafra.
Varios testigos defienden que habían hecho vida maridable y tenían un hijo de 14 años de oficio latonero. El cura informa que después de casado se ausentó de Zafra y que había tomado plaza alistándose en un regimiento.
El 23 de enero de 1811 se casa por segunda vez en la Iglesia del Sagrario de la Catedral de Cádiz cuando Antonio Cordero dice ser natural de Zafra y se casa con María Manuela natural de aquella ciudad siendo testigos don Andrés Portillo y don Rafael Pernía vecinos de aquella ciudad.
Por supuesto Antonio Cordero dijo que era soltero y lo probó gracias al apoyo de su padre político, su suegro Antonio Portillo oficial del regimiento de Holanda y Gregorio Atienza soldado.
Dos testigos dijeron que el matrimonio hizo vida en común durante 6 meses el tiempo en que vivió la esposa que murió el año de 1811 y Antonio Cordero se volvió a casar el 26 de enero de 1812 con Josefa Aguilar natural de Cádiz con quien vivió dos años.
A los dos años Antonio Cordero la abandonó y la mujer despechada comenzó a investigar su pasado y pudo constatar por otro músico militar todas sus andanzas matrimoniales, denunció a su marido y pidió al tribunal que su matrimonio fuera declarado nulo y así poder quedar ella libre.
Ante el tribunal Josefa Aguilar declara que la abandonó en 1814 llevándose otra mujer casada con quien también trataba.
En abril de 1816 el juez averigua el paradero de Cordero y resultó que en junio anterior había sido licenciado del ejército marchándose a Cádiz a ejercer su oficio de de sastre donde había estado algunos meses. Luego pasó a Ronda y en el mes de junio estaba en Osuna trabajando como sastre y asistiendo a algunas funciones con músicos.
No fue fácil averiguar su pista porque se cambiaba el nombre, y se hacía llamar José Cordero y decía que era natural de Zafra.
En septiembre se prendió a Cordero en Marchena y el 30 de ese mismo mes ingresó en prisión donde reconoció todos sus delitos diciendo que su afición a los matrimonios no era fruto de ninguna creencia o religión sino de flaquezas y miserias implorando la misericordia del Tribunal.