La Agencia Española del Medicamento confirma en su informe del 20 de julio, la relación entre la vacuna Janssen y la muerte del joven de un municipio sevillano a causa del Síndrome de Trombosis con Trombocitopenia). «Las trombosis se presentaron en localizaciones inusuales (trombosis cerebrales o venas esplácnicas); uno de los pacientes falleció. Los dos casos ocurrieron en pacientes entre 30 y 49 años, en esa franja de edad la tasa de notificación se estima en seis casos por millón de dosis», añade el documento según publica El Mundo.
Ya el pasado mes de Abril el informe de la Agencia del Medicamento revisó «las notificaciones de acontecimientos embólicos y trombóticos (formación de coágulos de sangre que resultan en la obstrucción de los vasos sanguíneos) que ocurren junto con trombocitopenia en personas que han recibido la vacuna COVID-19 Vaccine Janssen).
Entonces esta vacuna se usaba «únicamente en Estados Unidos, donde hasta el momento de la evaluación se habían recibido ocho casos de este tipo de trastorno en localizaciones no habituales con trombocitopenia (niveles bajos de plaquetas) después de recibir esta vacuna. Uno de los casos ocurrió en un ensayo clínico y los otros siete durante la campaña de vacunación (uno con desenlace mortal). Más de 27.000 personas se habían vacunado en los ensayos clínicos y alrededor de 7 millones en la campaña de vacunación de Estados Unidos» destaca el informe.
«Los casos notificados de trombosis con trombocitopenia, en algunos casos acompañados de hemorragia, incluían trombosis venosas graves, la mayoría en lugares no habituales como trombosis de los senos venosos cerebrales (donde los coágulos de sangre impiden el drenaje desde el cerebro) y trombosis de las venas esplácnicas que involucran una o más venas de los órganos abdominales, así como trombosis arteriales» destaca el informe de la agencia española del medicamento.
El SFC es un trastorno grave y muy poco frecuente, «caracterizado por un aumento de la permeabilidad capilar que permite la fuga de fluidos y proteínas desde el sistema circulatorio al espacio intersticial pudiendo dar lugar a shock y edema masivo» indica esta fuente.
Además el pasado 13 de Julio la Agencia española del medicamento informó que se ha «identificado el síndrome de Guillain-Barré (SGB) como una posible reacción adversa muy rara asociada a la vacuna frente a la COVID-19 de Janssen», por lo que recomienda «a los profesionales sanitarios prestar atención a la posible aparición de signos o síntomas de SGB para establecer un diagnóstico y tratamiento lo más precozmente posible, y explicar a los vacunados que deben solicitar atención médica inmediata en caso de que tales síntomas aparezcan».
La ministra de Sanidad, dijo en rueda de prensa que el caso confirmado es el registrado en la provincia de Sevilla de un hombre de 37 años vacunado en su empresa que sufrió un cuadro general de trombos que le provocó la muerte y sin patologías previas, según la familia publica El Mundo.
La Consejería de Salud, a través de un comunicado, informó este miércoles de que ,»como novedad», las personas de entre 40 y 59 años que aún no hayan sido vacunadas «se le ofrecerá las vacunas de ARN mensajero (Pfizer o Moderna) en lugar de Janssen como hasta ahora». Según datos de la Consejería de Salud, son ya 10.718 los mayores de 12 años que han sido vacunados con Janssen antes de viajar al extranjero por estudios.
El Ministerio de Sanidad no había autorizado la dispensación de la vacuna de Janssen en menores de 40 años salvo en situaciones puntuales, pero la Junta de Andalucía decidió usar Janssen también en las vacunaciones organizadas en los centros de trabajo a través del Plan Sumamos.