El códice de San Juan de la Cruz que fue vendido por 35 pesetas y se salvó de las llamas
José Antonio Suárez López
Los Ponce de León amaron la poesía de San Juan de la Cruz. Tanto que en Marchena se han encontrado dos códices antiguos del Cántico Espiritual uno en el convento de Santa María y otro en Santa Clara.
El Cántico Espiritual es el modo exacto de hablar a Dios en verso. San Juan de la Cruz, el mayor de los místicos, expresa de un modo nunca superado el proceso de unión del alma con el Creador.
El de Santa María o «Códice Mch» fue descubierto por el investigador mercedario Luis Vázquez Fernández, de la Real Academia de Doctores de Madrid, cuando buscaba poemas de la Madre Antigua, que Vázquez cree que tuvo algún trato directo con San Juan de la Cruz a través de carta, ya que la monja enterrada en el coro de las clarisas de Marchena usó los poemas de Juan de Yepes antes de que éstos fueran publicados.
Se ha comprobado que la Madre Antigua utilizó algunos versos de San Juan de la Cruz en sus propios escritos cuando la obra de este todavía no había sido publicada aunque circulaba en copias manuscritas.
Luis Vázquez cree que la presencia en Santa María del Códice de San Juan de la Cruz se debe al duque Pedro Ponce de León Dominico, Rector de la Universidad de Salamanca, obispo de Ciudad Rodrigo, que escribió el «Tratado de oración y contemplación» de clara influencia sanjuanista. Otra Ponce de León, Ana, Duquesa de Feria y monja clarisa en Montilla trató a Fray Luis de Granada.
Según luis Vázquez en el inventario de los libros que tenían los Duques en el Palacio Ducal de Marchena aparece el Cántico Espiritual.
El códice conservado aún en Santa María de Marchena fue publicado en 1996 en una edición facsímil por el Ayuntamiento de Úbeda, donde murió el santo y es una copia muy antigua del Cántico B o Manuscrito de Jaén, (conservado en el convento de Santa Teresa) la segunda remodelación del texto realizada por el doctor de la Iglesia. Tanto éste manuscrito como el de Sanlúcar de Barrameda, Códice A, que conserva notas y correcciones del Santo de Fontiveros, fueron declarados Bien de Interés Cultural en 2013.
La copia del convento de Santa Clara o Códice GV la encontró Guillermo García Valdecasas, investigador del colegio español de Bolonia fue propiedad de la Madre Antigua. Según Valdecasas lo encontró cuando se destruyó el convento de Santa Clara en un descampado entre basura y libros viejos que iban a ser quemados. El chatarrero de Marchena (Ismael ) se lo vendió por 35 pesetas y de esta forma se libró de las llamas y fue presentado en el congreso internacional de Roma de 1991.
La madre abadesa de Santa Clara la madre Clara Olivera hoy en Estepa explicó a Luis Vázquez que la presidenta de la entonces Federación de las Clarisas mandó quemar libros y manuscrito viejos y vender todos los objetos antiguos del convento de Santa Clara de Marchena tal y como aparece en el estudio previo de la edición facsímil.
San Juan de la Cruz se hizo fraile Carmelita en 1563 y poco después conoció a Santa Teresa, fue rector de la Universidad de Alcalá de Henares en 1571 y luego encarcelado en Toledo en 1577, pero un año después se fuga y viene a Andalucía fundando los conventos de Baeza y Granada y siendo vicario provincial en 1585. En 1590 vuelve a Ubeda expulsado de la orden en 1591. Fue beato en 1675 y santo en 1726.