Desde que a finales de los 70 un peluquero de Lantejuela que trabajaba en la base de Morón popularizara en Sevilla provincia el uso de los detectores de metales para buscar tesoros enterrados, la palabra expolio arqueológico ha estado ligado a la Campiña sevillana y comarcas de Marchena, Osuna, Ecija y Carmona.
Esta práctica tiene los días contados ya que la Junta inició en enero una reforma de la ley de Patrimonio Andaluz que prohíbe totalmente el uso de detectores de metales en Andalucía y que podría aprobarse por el Parlamento antes de fin de la legislatura.
El libro «Expoliar se va a acabar» editado por Tirant Lo Blanc detalla, entre otros, el caso de los expoliadores de Montemolín (Marchena), que fueron detenidos en otoño del año pasado, justo cuando, cargados de picos y palas se disponían a expoliar este yacimiento en plena noche. Al ser sorprendidos por la Guardia Civil cuando iban a cometer el delito solo podrán ser juzgados en grado de tentativa. El 8 de junio se presentó esta obra en la sede de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Madrid.
Fueron detenidos entonces y encausados pero su caso aún no ha sido visto por el Juzgado de Marchena, que acumula tres denuncias por este motivo en los últimos años, lo que evidencia cómo la lentitud de la justicia dificulta la labor de la administración en este y otros campos, según Ignacio Rodríguez Temiño (Conservador del Conjunto Arqueológico de Carmona), coordinador del libro «Expoliar se va a acabar» (Editorial Tirant Lo Blanc).
El libro, que se presenta el viernes 13 de Julio en el Museo de Gilena, recoge una serie de artículos técnicos y caso prácticos de expertos en arqueología y derecho, arqueólogos, juristas y policías que analizan las sanciones por el uso de detectores de metales en el ámbito del patrimonio y anticipan que está próxima su completa prohibición.
La presentación será en el Museo de Gilena a las 20 horas con la presencia de Ignacio Rodríguez Temiño (Conservador del Conjunto Arqueológico de Carmona), Ana Yañez (Profesora de Derecho Administrativo de la Universidad Complutense de Madrid), Francisco Matas, (Presidente de la Asociación para la Defensa de la Determinación Metálica) moderado por David Ruiz García, Director-Conservador de Museos en Colección Museográfica de Gilena.
La obra recoge un amplio conjunto de aportaciones multidisciplinares sobre las actuaciones contra el expolio arqueológico con experiencias policiales de lucha contra expoliadores e intermediarios; análisis criminológicos sobre los profesionales del expolio terrestre y subacuático.
Incluye también reflexiones jurídico doctrinales; en materia de sanciones por parte de representantes de Comunidades Autónomas y otras reflexiones sobre los daños provocados por el uso incontrolado de aparatos detectores de metales en zonas de interés histórico-arqueológico. Incluso desde los sectores más concienciados del mundo del detectorismo se reivindican experiencias de confluencia entre detectoristas y arqueólogos sobre proyectos de investigación concretos.