El Próximo miércoles 8 de Junio a las ocho y media de la tarde, se presentará en la iglesia de La Milagrosa el libro ‘Miguel Mañara’ (Editorial Mounier, colección Sinergia), escrito por el sacerdote diocesano Antonio Schlatter (Sevilla, 1968).
El autor tiene en su haber diversas publicaciones, entre las que destaca una biografía de Bartolomé E. Murillo (Murillo, con ojos nuevos; Eunsa, 2019). El acto literario será presidido por Eduardo Ybarra, hermano mayor de la Santa Caridad de Sevilla.
El 9 de mayo de 1679 fallecía Miguel Mañara Vicentelo de Lecca, caballero de la orden de Calatrava y hermano de la hermandad de la Santa Caridad de Sevilla. El mismo día se dio lectura a su testamento, documento escrito por el propio Mañara meses antes, cuyo análisis ha publicado la Consejería de Cultura.
Nació el 3 de marzo de 1627 dentro de una familia destacada de la Sevilla del XVII. Oriundos de la isla de Córcega hicieron fortuna en la ciudad con el comercio con América, convirtiéndose con el tiempo Tomás Mañara, su padre, en un hombre público, ocupando diversos cargos. Esta posición le permitió hacerse con un importante patrimonio, del que nos ha quedado la casa palacio de los Mañara en el barrio de San Bartolomé.
Miguel de Mañara ocupó varios cargos públicos de la ciudad, pero a la muerte de su esposa en 1661 dedicó toda su fortuna a la hermandad de la Caridad que ya existía desde antes, para enterrar a los ahogados en el río, a los ajusticiados y a los que aparecen muertos en las calles.
El pensamiento religioso de Mañara quedó recogido en las Reglas de la Hermandad en varios poemas y en la obra Discurso de la Verdad, editada en 1672 además de un su testamento. A partir de este testamento nace la leyenda literaria del XIX con la idea de que antes de su conversión Mañara seductor, que se arrepiente al final de sus días, con el personaje de don Juan Tenorio de Zorrilla, que le dio una interpretación a la leyenda popular del encuentro de Mañara con la Muerte, en la forma de una bella mujer.
Yo, don Miguel Mañara, ceniza y polvo, pecador desdichado, pues los mas de mis logrados días ofendí a la Majestad altísima de Dios, mi padre, cuya criatura y esclavo vil me confieso. Serví a Babilonia y al demonio, su príncipe, con mil abominaciones, soberbias, adulterios, juramentos, pecados y latrocinios. Testamento de Miguel de Mañara.
Luisa Francisca, hija de Miguel de Neve se casa con Juan Antonio Mañara, hermano de Miguel de Mañara y a su muerte, en 1641 con Juan de Saavedra,I conde de Castellar. La casa de Arias de Saavedra acumuló así los mayorazgos de Alvarado, Ramírez de Cartagena, y antes había emparentado con los Ponce de León a finales del XV.