El proyecto H2OliveTree se presenta en el I Salón de la Innovación y Tecnologías del Agua
José Antonio Suárez López
El proyecto H2OliveTree, es una investigación pionera en el que científicos de la Universidad de Córdoba, en su Cátedra de Hidrología de la Facultad de Ingenieros Agrónomos, trata de demostrar que las aguas procedentes de la industria del aderezo del olivar pueden ser usadas para riego por goteo del olivar.
Se presentará el próximo miércoles 19 de septiembre en las jornadas técnicas del I Salón de la Innovación y Tecnologías del Agua que se celebra en Sevilla del 19 al 21 en Fibes.
Teresa Benitez, Gerente de Serranía Suroeste, invitada por la Consejería de Agricultura, presentará el proyecto el próximo miércoles a las 11,20 horas en dicho congreso dedicado a los proyectos innovadores conectando agua y agricultura.
El proyecto parte de la base de que el agua de calidad reducida procedente de residuos del olivar se puede usar en la Agricultura siempre que se rieguen plantas tolerantes a la salinidad, se maneje el riego de forma cuidadosa, y se procure un lixiviado del exceso de sales en el suelo.
El olivo es una planta tolerante a la salinidad, y, de hecho, se dan bastantes casos en los que se han aprovechado el agua disponible y además se sabe que las lluvias otoñales e invernales, además de diluir los solutos del agua depositada en balsas abiertas, permiten el lixiviado del exceso de sales en el perfil del suelo.
Miguel Angel Márquez, Alcalde de Arahal explicó que «se trata de una investigación científica y académica que pretende probar si esas aguas residuales se pueden usar para regar olivos». Participa una cooperativa Labradores de la Campiña de Arahal y la asociación de regantes de Arahal, Ampema, Aceitunas de Mesa por el Medio Ambiente de Arahal que se encarga de la gestión de la balsa de riego de Arahal y el propio Ayuntamiento de Arahal.
Se tratra de una investigación «sin precedentes» para comprobar «hasta qué punto se puede reducir la salinidad del agua de las balsas, y hacer experiencias de campo con el olivo para ver si el olivo lo admite y siguen sacando la misma productividad que con agua de riego normal» explica Miguel Angel Márquez, Alcalde de Arahal.
El Equipo de trabajo de la Universidad de Córdoba Grupo AGR-127 Hidrología e Hidráulica Agrícola está formado por José Luis Ayuso Muñoz, Vanesa García Gamero, Juan Vicente Giráldez Cervera, Ana María Laguna Luna, Gonzalo Martínez García, Adolfo Peña Acevedo, Tom Van Walleghem y Blanca Cuadrado.
«La investigación ya la tiene hecha la Universidad de Córdoba, al menos en su parte teórica y ahora lo que hacemos es probarla ya en terrenos» explica Teresa Benítez.
Durante los dos años que dure el proyecto se ofrecerá información del comportamiento de los árboles y del suelo, y se irán publicando las novedades en la página web del proyecto, H2Olivetree.
«Se trata de un proyecto piloto en el que se han cogido distintas parcelas y distintos tipos de suelos en los que se va a probar el agua. Participan dos cooperativas, la de La Puebla y Arahal, que tienen aricultores de casi toda la comarca, proque tampoco es necesario más, como muestra. Los agricultores de las cooperativas han prestado terrenos para hacer las muestras. Se han tomado distintas tipologías de suelo para ver como se comporta el agua, la tierra y los olivos» explica Teresa Benítez, Gerente del GDR Serranía Suroeste.
Miguel Angel Márquez explica que «uno de los grandes problemas de la industria aceitunera son los residuos que genera y si conseguimos nuestro objetivo de eliminar esos resíduos y conseguir agua casi potable a través de un procedimiento científico para que el olivo pueda seguir rindiendo lo mismo, eso sería una gran ventaja y el agua que se compre sería más barata».
Ya están instalados los ocho puntos de ensayo junto a balsas de aderezo ubicadas en Hacienda El Roso (ctra. Morón-Marchena), Cortijo del Taraje, paraje La Lagartija (Morón), Lantejuela y Arahal. «Ya se ha empezado a regar, entonces eso lleva unos sensores a distintas profundidades, y va ofreciendo datos».
«Creemos que el estudio arrojará datos que nos permitirán conocer cómo usar las aguas de lavado, la salmuera, que hasta ahora eran resíduos que va a balsas de evaporación pero que ahora podrán reintroducirse en el ciclo del agua», explica Teresa Benítez, Gerente de Serranía Suroeste. «No consiste en desalar el agua, sino en reutilizar parte del agua residual, y mezclada en distintas proporciones, se pueda reutilizar otra vez. Se analizan todas las aguas residuales de la industria aceitunera a ver en que momento se pueden reutilizar».
216.766,90 € de Fondos FEADER (Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural, 80% y Junta de Andalucía, 10%) para realizar pruebas en ocho fincas de ensayo.
El grupo de trabajo está formado por Serranía Suroeste; la Universidad de Córdoba; las Cooperativas de Arahal (Labradores de la Campiña) y La Puebla (Las Virtudes); La Fundación Aceituna de Mesa; Manzanilla Olive y Ayuntamiento de Arahal.
Actualmente ni el Ayuntamiento de Marchena ni la Cooperativa Casil de Marchena forman parte de Serranía Suroeste. El Ayuntamiento de Marchena abandonó este grupo por una cuestión contable, y una vez resuelto, no ha vuelto aún a dicho grupo de Desarrollo Rural, del que es cofundador y ha donado su sede ya que se ubica en el antiguo Ayuntamiento de Marchena.