En España, la Agencia de Seguridad Aérea (AESA),ya permite el uso de aeronaves no tripuladas para repartir paquetes siempre que se cumplan unos requisitos “muy exigentes”, según Isabel Maestre, directora de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. El vuelo de drones estará condicionado por el peso del dron, la presencia de otras personas y la cercanía a edificios.
Amazon no es la única compañía que experimenta con estos dispositivos. Alphabet —la matriz de Google—, UPS o la cadena de supermercados estadounidenses Walmart son algunas de las grandes compañías que están introduciendo drones de reparto en sus negocios. En España, Correos ha realizado pruebas con drones capaces de alcanzar los 100 kilómetros por hora y soportar vientos de hasta 40 kilómetros por hora.
A las barreras legislativas, se suman los costes iniciales de implementación y la posibilidad de que este tipo de tecnologías no estén lo suficientemente maduras. Una vez superados este tipo de obstáculos, entre los desafíos a largo plazo destaca el de aumentar la capacidad de carga. Aunque la legislación lo permitiese, algunos envíos pesados no se podrían realizar con muchos drones actuales.
Correos explica que “La intención es aplicar esta tecnología para mejorar las capacidades de distribución de Correos y como una herramienta complementaria a disposición de los carteros que les facilite realizar sus tareas de reparto en zonas rurales de difícil acceso o que se quedan aisladas por las inclemencias meteorológicas, sin exponer su seguridad”.
Además de llegar a zonas de difícil acceso, los drones autónomos podrían suponer un ahorro de costes a las empresas y reducir las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero.
Un aspecto especialmente importante en un momento en el que el comercio online no para de crecer. La pandemia de coronavirus lo ha disparado. Cinco de cada 10 españoles ya compran por Internet, según la Encuesta sobre Equipamiento y Uso de Tecnologías de Información y Comunicación en los Hogares elaborada por el Instituto Nacional de Estadística.
Aún es pronto para que los drones tomen los cielos de manera masiva, al menos en España. “Nuestra visión es que empezarán a verse iniciativas en condiciones muy acotadas, tales como proyectos experimentales u operaciones de reparto de emergencia, en los próximos meses, pero el transporte masivo de bienes de consumo tendrá un horizonte temporal de, al menos, dos o tres años”, explica Maestre.
Mientras tanto, compañías como Amazon aseguran que empezarán a usar estos drones cuando y donde tengan el apoyo regulatorio necesario para hacerlo de manera segura
FUENTE: Tungsteno es un laboratorio periodístico que explora la esencia de la innovación. Ideado por Materia Publicaciones Científicas para el blog de Sacyr.