Las Meninas es una gran ficción, según el hispanista Jonathan Brown el mayor experto en Velázquez. Las Meninas es producto de la imaginación del pintor. Los hechos se convierten en ficción, es un retrato familiar, inventado, una interpretación manipulada de la realidad de la vida en el Palacio Real plasmado en un cuadro ideado como «el mejor cuadro que el rey hubiera visto jamás”.
La infanta Margarita protagoniza del cuadro de Las Meninas. Detrás, en un espejo están la reina Mariana de Austria, reina consorte (1649-1665) y regente (1665-1671) y el Rey Felipe IV, su tío con quien se casó tras el fallecimiento de su primera esposa. Enfermo de cuerpo y mente decidió casarse con su sobrina de 15 años, teniendo 44. La reina dio a luz con 17 años, a su primera hija. Mariana de Austria tuvo como enemigo al hijo natural reconocido de Felipe IV, Juan José de Austria, que finalmente se hizo con el poder hasta su muerte.
Aunque no aparece en el cuadro, al lado de la reina iba su camarera mayor Elvira Ponce de León y Álvarez de Toledo, (Marchena –Madrid 1691). Alcanzar este cargo supuso el culmen del poder para la Casa de Arcos, ejerciendo su cargo cerca del poder entre 1654 y 1660, y teniendo acceso directo a la familia real, lo que significaba un gran poder directo.
Elvira Ponce de León se casó con 1627 con Fadrique de Toledo Ossorio, jefe de la Casa de Alba Capitán General de la Armada del Mar Océano. La confianza que la Reina depositó en Elvira la convirtió en foco de atracción de cortesanos y ministros deseosos de acercarse al poder real.
Elvira fue lider del grupo defensor de la reina ante los ataques del grupo del hijo del emperador Juan de Austria, que se hizo finalmente con el poder, grupo liderado por su prima y ama de Carlos II, la marquesa de Los Vélez, Engracia de Toledo.
Con los Austrias, tres hermanos Ponce de León alcanzaron su cénit en el poder junto a la casa Real. En el 54, Elvira Ponce de León es nombrada camarera mayor de la Reina, puesto de los más importantes de la Corte, mientras su hermano Luis Ponce era capitán de la Guardia Real con pleno acceso a la Familia Real y luego embajador en Roma y el hermano de ambos Rodrigo había sido Virrey de Nápoles en el 46.
El Virrey de Nápoles.
Elvira era hija de Luis Ponce de León y Zúñiga, V marqués de Zahara, y de Victoria Álvarez de Toledo Colonna, hermana de Rodrigo Ponce de León, IV duque de Arcos, a quien le enfrentaron varios pleitos a lo largo de su vida, relacionados con el reparto del patrimonio familiar.
Doña Elvira era una agente político dentro de la corte en la segunda mitad del siglo XVII, con un papel principal como defensora de los intereses del grupo imperial. Se responsabilizó como viuda del mantenimiento del prestigio de su familia, concertando además los matrimonios de su hijo e hijas con familias del nivel requerido para mantener y fortalecer la preeminencia de su linaje dentro de la sociedad cortesana.
El marchenero Luis Ponce de León, (Marchena 1605- Milán 1668) hermano del IV Duque de Arcos, y de Elvira fue uno de los más grande de la España de los Austrias, alcanzando los más altos cargos al servicio de Felipe IV. Virrey de Navarra (1646,) capitán de la guardia de Felipe IV (1648), embajador ante la Santa Sede (1659-1662) y gobernador de Milán.
La Camarera mayor, servía a la soberana de manera inmediata y directa y tenía autoridad sobre los cargos de la casa de la reina. Este cargo tenia que ser ocupado por una grande de España, elegida entre las damas de la reina de mayor antigüedad. Dormía con la reina cuando no lo hacía el Rey, y en una estancia inmediata cuando esto sucedía con un sueldo anual de 6000 pesetas anuales y disponía de oficina y cuarto propio en el Palacio Real de Madrid.
Cuando Juan José de Austria empieza a reclamar el poder y controla en su bando a Engracia de Toledo, Elvira Ponce de León gana poder y le reina le encargó personalmente entregar la correspondencia del conde de Harrach a la Reina y de remitir las respuestas de ésta al diplomático, tal y como demuestra este párrafo suscrito por la propia camarera: “luego que reciví las tres cartas que vuestra excelencia [el conde de Harrach] me embio de Alemania para la Reyna nuestra señora conformandome con su pareçer de vuestra excelencia se las volvi a remitir de cuyo recibo no me diçe nada vuestra excelencia y me tiene con cuydado hasta saber si an llegado a manos de vuestra excelencia”.
Elvira Ponce de León escribió numerosas cartas al conde de Harrach entre enero de 1674 y diciembre de 1677; en estas misivas, la camarera mayor comunicaba con puntualidad la recepción del correo de Viena por parte de la Reina, hacía comentarios sobre la salud de la Familia Real y contaba anécdotas del exilio de la Reina en Toledo, ciudad a la que la Soberana fue enviada tras la toma del poder de don Juan José en diciembre de 1676.
Elvira Ponce de León, siguió a la Reina cuando fue destituida hasta su exilio en Toledo donde continuó intercambiando correspondencia con el conde de Harrach, al que demostró fidelidad. Elvira Ponce de León falleció el 30 de septiembre de 1691, tras treinta y siete años de servicio en Palacio.
Fuentes
OLIVÁN SANTALIESTRA, Laura, “Elvira Ponce de León y Álvarez de Toledo” en Diccionario Biográfico de la Real Academia de la Historia. Disponible en línea.