Tras dos años de trabajos arqueológicos ya puede decirse que el antiguo Hospital de la Misericordia, del siglo XV-XVI, en el callejón del Niño Perdido fue una sinagoga según ha confirmado hoy el arqueólogo Miguel Ángel de Dios Pérez, que ha trabajado en el edificio. En 2016 el edificio fue comprado por el Ayuntamiento, que ha anunciado que se abrirá a las visitas aunque aún no han terminado los trabajos.
Se trata de una de las pocas sinagogas localizadas en la provincia de Sevilla junto con San Bartolomé y Santa Maria la Blanca, iglesias sevillanas luego convertidas al culto cristiano y a diferencia de ellas, a día de hoy no es un templo sino un edificio municipal lo que abre múltiples posibilidades culturales y turísticas para que en el futuro Utrera se convierta en el centro de interés del mundo sefardí como hoy lo es Lucena en Córdoba donde se halló el mayor cementerio judío de la península, poniendo al pueblo en el mapa internacional.
Falta por conocer ahora el lugar de enterramiento de los judíos utreranos que fueron estudiados ampliamente por Juan Gil. En la habilitación de febrero de 1496 resultaron reconciliados 86 vecinos de Utrera siendo así uno de los municipios sevillanos con una comunidad de conversos más importante solo superado por Ecija, donde se reconciliaron 431 personas y seguido de Marchena con 75 reconciliados. Son datos extraídos de «La Inquisición y los judeo conversos sevillanos» de Juan Gil.
En la habilitación de febrero de 1496 resultaron reconciliados 86 vecinos de Utrera siendo así uno de los municipios sevillanos con una comunidad de conversos más importante solo superado por Ecija, donde se reconciliaron 431 personas y seguido de Marchena con 75 reconciliados. Son datos extraídos de «La Inquisición y los judeo conversos sevillanos» de Juan Gil.
Los otrora poderosos judíos de Sevilla huyeron de la ciudad y se refugiaron en los pueblos buscando la protección nobiliaria los Ponce de León (Casa de Arcos-Marchena) y Guzmanes (Casa de Niebla). Pedro Fernández Benadeva fue quemado y su familia huye a Niebla y alrededores. Los hijos del mayordomo Pedro González Boniel se refugiaron en Utrera y Marchena acogió a la prole de Juan Alonso de Loya y a los hermanos de la bella Susona.
Es el caso de Bartolomé Caro, alcalde de Utrera que fue uno de los más conocidos conversos del municipio, juzgado y reconciliado. (A.P.S., I 1562, 1 [= 102], f. 50Ir). Otro vecino de Utrera Marcos Caro, aparece en los listados de reconciliados, situación que también afectaba a sus descendientes como su hijo Juan Díaz Caro, marido de Quiteria de la Torre (A.P.S., I 1556, 2 [= 91], f. 1.022).
El converso Alonso de Tapia, alcalde del castillo de Utrera, vecino de Utrera pasó de tomar posesión de los bienes que había dejado Payo de Ribera en Utrera a dar poder al procurador Iñigo de Arechiga en 1520 para que defendiera a su mujer, Elvira Núñez, presa de la Inquisición.
«El estudio estratigráfico de los paramentos del edificio permiten proponer la hipótesis de que nos encontramos ante un complejo sinagogal que excede la sala de oración» y que incluiría además otras estancias como el baño ritual o mikvé que aún no sido hallado.
El estado de conservación de la sinagoga, «no deja de ser excepcional con las evidencias arqueológicas documentadas, incluido su alzado completo, pueden restituirse su superficie y volumetría originales» según el arqueólogo.
Los trabajos arqueológicos iniciados hace dos años dejan un resultado claro si bien es necesario seguir excavando en busca de nuevas estancias de ese complejo sinagogal como son la zona de mujeres o de los baños que aun no han sido hallados informa Utreraweb.
El Ayuntamiento anuncia que «va a preparar el edificio para que, aun estando en obras, se pueda visitar e interpretar» lo encontrado en el que fuera Hospital de la Misericordia, aunque no es el primero ni el último de los usos de este edificio. En este inmueble ha estado la Casa Cuna e incluso ha sido local de copas, pasando por escuela, restaurante y sala de fiesta. «
En total, se han realizado hasta el momento 4 sondeos arqueológicos. Uno de ellos, el localizado en la cabecera de la nave central de la iglesia, es el que «por sus resultados, ha contribuido de una manera más clara a alcanzar el principal objetivo» de identificar la sinagoga que es una de las pocas conservadas en España desde 1492.
Se ha localizado la sala de oración de la sinagoga, de los siglos XIV-XV y «a falta de alcanzar los niveles fundacionales», se ha documentado su alzado original, el Hejal y su acceso –armario o pequeña recámara decorada donde se guardan los rollos con los pergaminos de la Torá–, el banco perimetral y evidencias de varias fases en la vida del edificio.
Los trabajos también han permitido fechar el momento de abandono de la sinagoga con la expulsión de los judíos de España el 31 de marzo de 1492. Han quedado por localizar, pendiente de la nueva fase de los trabajos arqueológicos, el mikvé, el biham y el espacio reservado para las mujeres, de los que «muy probablemente, puedan encontrarse evidencias arqueológicas en el futuro con la ampliación de la investigación”.
Tras la expulsión de los judíos de España, se estableció el Hospital de la Misericordia, consagrándose al culto católico la anterior sinagoga. A lo largo del siglo XVI, se realizaron varias repavimentaciones y se construyó «reutilizando parcialmente el banco perimetral de la sinagoga».
Información, fotos y vídeos de Utreraweb.