La empresa francesa Techno BAM (Borne Anti-Mosquitos), con sede en Senas, región del Ródano, financiado por Air Liquide y TDH, ha desarrollado el dispositivo de captura de mosquitos Qista, una trampa natural que no usa tóxicos químicos y eficaz que mata a casi el 90% de los mosquitos en un radio de 60 metros sin el menor insecticida y recogen datos para monitorizar la invasión del mosquito tigre, vector de enfermedades infecciosas.
Fotos France Culture.
Este mosquito mata cada año transmitiendo dengue, chikungunya, malaria, fiebre amarilla o incluso Zika. Qista Lab es un laboratorio de biología molecular interno, que estudia la propagación del mosquito y las enfermedades que porta.
La máquina dispersa dióxido de carbono reciclado que atrae a las hembras de los mosquitos (los machos no pican) y difunde un olor similar al del cuerpo a través de ácido láctico que atrae a la hembra y la succiona a una trampa sin salida, según publica el diario digital France Culture.
El terminal antimosquitos Qista [BAM] que cuesta alrededor de mil euros, según modelos, es un repelente de mosquitos ecológico que respeta las personas, los animales y los recursos naturales, reduciendo las molestias de los mosquitos tradicionales y tigre hasta en un 88%*. Y cada terminal es eficaz para erradicar los mosquitos en un radio de hasta 60 metros en áreas despejadas y exteriores.
La máquina funciona con una conexión a red eléctrica doméstica o urbana, y tiene un funcionamiento 100% natural, 0% tóxico, pperable a distancia a través la aplicación móvil y programable para un uso óptimo y sin gestión y tiene una eficacia probada dentro de un radio máximo de 60 metros en zonas despejadas.
Estudios realizados por la empresa indican que las picaduras se ha reducido en un 88% en un radio de 30 a 60 metros. En un mes, la máquina captura alrededor de 7.800 mosquitos de 12 especies diferentes en un día, reduciendo el ciclo reproductivo de los mosquitos tigre que ponen cerca de 200 huevos en 48 horas. Actualmente la empresa ha vendido más de 6000 unidades de la máquina anti mosquitos en más de 16 países, de 50 municipios franceses ya usan este sistema, además de países africanos como Costa de Marfil, Senegal, y la compañía está actualmente introduciéndose en Asia y Estados Unidos.
Los mosquitos machos y otros insectos, abejas, mariposas y mariquitas no se sienten atraídos por la trampa.
La terminal también ofrece un sistema de monitorización en tiempo real a través de sensores geolocalizados que analizan el volumen de mosquitos capturados y los niveles actuales y futuros de infestaciones. Estos datos luego se cruzan con los cambios meteorológicos y ambientales en las inmediaciones de cada dispositivo. Las autoridades competentes, informadas de los niveles de infestación, pueden entonces cuantificar las poblaciones de mosquitos con el fin de mejorar y anticipar sus movimientos con el fin de priorizar las acciones a implementar con el fin de optimizar la captura.