Este sábado 16 de marzo, a las 19:00 horas, la histórica Iglesia de San Juan Bautista de Marchena se engalanará para una ocasión especial: la interpretación del «Miserere» de Hilarión Eslava por la Orquesta de Cámara del Guadalquivir y el Coro del Ateneo de Sevilla. Con la batuta de Antonio Martínez Oliva y la participación de solistas de renombre, este concierto promete ser un momento cumbre para los amantes de la música sacra.
Javier Carmona, músico marchenero que interpretará esta pieza destaca que «no es una obra fácil de tocar ni de cantar» y recomienda a los oyenetes que sigan con atención la letra del libreto que se entregará con la entrada, lo que facilitará la compresnsión de cada pieza de la compsición y permitirá una atención más profunda y espiritual, logrando de esta forma un mayor impàcto emocional, que se se amplificará gracias a la estupenda acústica del templo mayor de Marchena.
El Miserere de Eslava, es una obra maestra de la música sacra, y se espera que resuene en los muros de la Iglesia de San Juan, creando un momento de profunda reflexión y belleza espiritual. La interpretación de esta pieza en un espacio tan históricamente significativo para la música sacra en Marchena, no solo es un tributo a la obra de Eslava, sino también un reconocimiento del legado musical de la iglesia de San Juan.
«La acústica del templo de San Juan es única, y contribuye de manera significativa a la experiencia tanto para los intérpretes como para la audiencia,» afirma Carmona, destacando cómo el sonido enriquecido y la atmósfera espiritual del lugar elevan la interpretación del Miserere.
Las entradas, disponibles por tan solo 5 euros en la Oficina de Turismo, brindan la oportunidad de ser parte de esta experiencia única. 300 personas podrán disfrutar de este evento histórico que permite que una orquesta y coro de gran reprtorio interpreten esta histórica pieza compuesta para la otrora rica iglesia matriz de Marchena. Un encuentro cultural que será un homenaje a una obra que ha marcado la historia de la música religiosa en España.
El «Miserere» de Eslava, aunque conocido por su versión para la Catedral de Sevilla compuesta en 1835, encuentra en la Iglesia de San Juan Bautista de Marchena un escenario con un significado profundo. En 1860, la prosperidad económica de la parroquia permitió encargar al mismo Eslava una versión más solemne y profunda de la obra, destacando su importancia tanto religiosa como cultural.
Desde el siglo XVI, la interpretación del «Miserere» de Eslava en la iglesia de San Juan Bautista se ha convertido en un hito. Financiado ininterrumpidamente por el Ayuntamiento desde aquel entonces hasta 1930, la tradición se vio interrumpida durante la República, para renacer en el año 2000. Desde entonces, la pieza ha sido interpretada repetidamente, no en los oficios litúrgicos de Semana Santa como en tiempos pasados, sino en formato de concierto, manteniendo viva la tradición en el mismo templo de San Juan.
El investigador José López Calo investigó las partituras originales y llegó a la conclusión de que las partituras del Miserere para Marchena, Utrera y Baeza, son las mismas. «La sorpresa vino cuando pude ir a esas localidades y leer esas partituras, o, en su caso, las partichelas, y constaté que se trataba, en todos los casos, de la misma composición», es decir no hay un Miserere de Marchena, distinto del de Utrera o Baeza. Tampoco se sabe con certeza cual de ellos fue el primero.