La cosecha de aceituna de mesa de 2022 –con la provincia de Sevilla como principal productora– será «la más corta de todo el siglo», con 406.000 toneladas, una cantidad que, «de no ser por la aceituna almacenada de la campaña 2021, resultaría de todo punto insuficiente para poder abastecer al mercado nacional y atender los compromisos de la industria con los mercados foráneos». Así lo ha advertido Asaja Sevilla este jueves en una nota de prensa con motivo de la XL Jornada de Aceituna de Mesa que se celebra en Pilas (Sevilla), con la colaboración de la Caja Rural del Sur y el apoyo de la Diputación de Sevilla bajo la iniciativa ‘Reactivando la economía de la provincia de Sevilla mediante el impulso al crecimiento y la creación de empleo en el sector agrario’.
La jornada será inaugurada esta tarde por el alcalde del Ayuntamiento de Pilas, José Leocadio Ortega; el viceconsejero de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Vicente Pérez, y el presidente de Asaja Sevilla, Ricardo Serra. Esta cosecha «tan corta, casi un 40% menor que la pasada», según los cálculos de la organización agraria, se debe al «propio agotamiento» de la arboleda tras la «histórica cosecha» anterior, y por las «secuelas del grave déficit hídrico acumulado», al que se han sumado las olas de calor de los últimos meses. Los daños que han causado a los árboles estos dos últimos factores pueden extenderse incluso a la campaña de verdeo del próximo año y «condicionar» la futura producción, advierten ya desde Asaja.
La campaña, que arranca estos días con el verdeo, llega este año con retraso por la falta de calibre y maduración a causa de la escasez de agua y con un 38% menos de producción, pero con «buenas perspectivas» en cuanto a los precios, ya que todo indica que tenderán «al alza», vaticina la organización. El responsable de la sectorial de aceituna de mesa de Asaja Sevilla, José Pedro Guzmán, recuerda que este verdeo viene precedido de una campaña histórica, la de 2021, en la que se alcanzó una producción récord de 659.000 toneladas de aceituna de mesa, lo que llevó a unas disponibilidades de 1.022.000 toneladas.
Esto ha permitido cubrir la demanda tras la baja producción que obtuvieron dos de los grandes productores mundiales de aceituna de mesa: Grecia, donde los estragos de la sequía y las olas de calor que afectaron a la floración hicieron caer en un 83% la producción de su variedad Halkidiki (que compite con nuestra aceituna gordal); y Egipto, cuya cosecha se redujo un 37% respecto a la campaña anterior. Esta situación favoreció también las exportaciones de España a terceros países, que se incrementaron un 6%, lo que junto al aumento del 10% de consumo interior, permitió mantener unos precios estables tanto en verde como en transformado.
Con estos precedentes, la presente campaña se iniciará con los stocks «más altos» de toda la serie histórica, con un total de 429.000 toneladas (la media de las últimas cinco campañas es de 366.000 toneladas), un 23% superior al stock de la campaña anterior, que partía de 349.000 toneladas. Si como estiman los servicios técnicos de Asaja Sevilla la cosecha de esta campaña se reduce un 38%, con una producción final de 406.000 toneladas, «estaremos ante la campaña más corta del siglo y, por primera vez en la historia, los stocks superarán a la producción».
Con estas previsiones, las disponibilidades de aceituna de mesa serán en esta campaña un 17% menores a las de la pasada campaña (847.000 toneladas), y un 11% inferiores a la media de los cinco últimos años (953.000 toneladas). Pese a ello, «y siempre que las posibles adversidades climáticas no hagan descender más la cosecha y acaben por distorsionar este balance, nos encontramos en una situación de equilibro, con las disponibilidades justas para abastecer los mercados nacionales e internacionales». No obstante, «si no llueve lo suficiente durante los meses de septiembre y octubre, parte de la aceituna que aún no ha alcanzado el tamaño adecuado no se salvará, por lo que la producción final podría ser muy inferior a la estimada a 8 de septiembre».
Por variedades, los servicios técnicos de Asaja Sevilla estiman una producción de 142.000 toneladas de aceituna manzanilla (25% inferior a la campaña anterior, en la que se recolectaron 189.000 toneladas). La comarca sevillana del Aljarafe, que tradicionalmente aporta el 51% de la producción de esta variedad, aportará esta campaña el 70% de la cosecha debido al fuerte descenso de producción en Los Alcores y La Campiña por la vecería del olivar y la sequía. La producción de gordal se reducirá un 51%, pasando de las 41.000 toneladas de 2021 a 20.000 en esta campaña. La cosecha de esta variedad será media en el Aljarafe y Los Alcores, pero muy baja en la Campiña, por la vecería derivada de la excepcional campaña anterior.
En Hojiblanca se estima un 34% menos de producción, con 206.000 toneladas, tras pasar factura la cosecha récord de 310.000 t del año anterior. El descenso más acusado será en las variedades carrasqueña y cacereña. La carrasqueña se reducirá en un 43% (de 25.000 toneladas en 2021 a 14.000 en 2022), mientras que la cacereña experimenta la mayor de las caídas, con un 87% menos de producción (de 68.000 toneladas en 2021 a 9.000 en 2022). Otro factor determinante que agudiza la tendencia de precios al alza de la aceituna de mesa en la presente campaña es el «desbordado incremento» del coste de los insumos (+120% el gasóleo, +180% la energía y +100% los fertilizantes, entre otros). «La de 2022 está siendo una campaña mucho más cara para los productores», alertan desde Asaja Sevilla.
A esta tendencia de precios al alza «contribuirá también» la situación de Estados Unidos, principal país importador de aceituna de mesa que lleva dos años consecutivos con caída de producción. Este año, se prevé una caída del 59% de su cosecha, que se quedará en 20.000 t, por lo que deberá incrementar sus importaciones para cubrir su alta demanda. Las envasadoras de Estados Unidos ya han llegado a un acuerdo con los productores estadounidenses, que recibirán 1,40 dólares por cada kilo de aceituna manzanilla entregado. Igualmente, en esta campaña impactará la puesta en marcha de la nueva PAC 2023, en la que el sector de la aceituna de mesa verá «reducidas» las ayudas que venía recibiendo en un porcentaje que se sitúa de media entre el 20 y el 30%.
Por último, en la XL Jornada de Aceituna de Mesa se va a analizar el avance en los ensayos de olivar de mesa en diferentes sistemas de cultivo que presentará María Paz Suárez, investigadora de la Universidad de Sevilla; y se expondrán las últimas novedades en la implantación y manejo de las cubiertas vegetales, especialmente las derivadas de los nuevos requisitos para acceder a los ecoregímenes de la PAC. Esta ponencia estará a cargo del investigador del IFAPA, Sergio Colombo.