La Dirección General de Tráfico (DGT) inicia este lunes hasta el 12 de marzo una campaña especial de vigilancia y control del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil (SRI), tanto en vías urbanas como interurbanas de Andalucía.
En la última campaña desarrollada en la comunidad, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, además de los de las policías locales que se sumaron a la campaña, controlaron 55.913 vehículos, de los que 904 fueron sancionados por infracciones bien de conductores (439), pasajero (403) o por incorrecta utilización de los SRI (62 menores).
Conviene recordar que, para evitar este tipo de comportamientos, la Ley de Tráfico y Seguridad Vial ha elevado a cuatro los puntos que se pierden por no utilizar el sistema de retención infantil adecuado o no se hace de la manera correcta, del mismo modo que se ha hecho con el no uso del cinturón de seguridad, se indica en nota de prensa.
Si llevar el cinturón puesto reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, en el caso de los niños, la utilización de los sistemas de retención infantil es aún más importante, ya que los datos demuestran que nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales se habrían evitado si se hubieran utilizado los sistemas de retención obligatorios. Además, en caso de accidente, las lesiones se reducen hasta en un 75 por ciento con un uso adecuado de los mismos.
CINTURÓN DE SEGURIDAD Y SRI
La DGT insiste en que el cinturón es imprescindible también en los asientos traseros ya que en caso de impacto frontal, por ejemplo, la probabilidad de que un ocupante de esos asientos golpee mortalmente a otro pasajero de delante puede ser hasta ocho veces mayor.
Sin cinturón de seguridad, a 80 kilómetros por los pasajeros de atrás no tienen ninguna forma de sujetarse y son proyectados con los de delante con una fuerza equivalente al golpe de una bola de 1.200 kg a 10 km/h, lo que podría matar o lesionar gravemente a los ocupantes de los asientos delanteros.
En el caso de los SRI, es obligatorio para niños con una altura inferior a 1,35 metros (alrededor de 12 años) y recomendable hasta los 1,50 metros homologados a su talla y peso. En todos los casos, la banda diagonal del cinturón ha de pasar por la clavícula sobre el hombro y bien pegada al pecho, mientras que la banda ventral ha de quedar lo más baja posible sobre la cadera. Si la banda del hombro toca el cuello o pasa bajo el mentón, el niño debe seguir utilizando un asiento elevador y nunca ir con la banda debajo del brazo o detrás de la espalda.