Icono del sitio Marchena Noticias. Marchena Secreta. El tiempo en Marchena. Sucesos Marchena. Planes de verano en Andalucia. Marchena Noticias

La iluminación pública de las calles de Marchena y Paradas comenzó el 1 de Enero de 1900

La llegada de la luz eléctrica a las ciudades y pueblos de España durante el último cuarto del siglo XIX y principios del siglo XX marcó una revolución en la vida cotidiana de los habitantes y en la transformación urbana de las localidades. Cada localidad tiene su propia historia relacionada con este cambio tecnológico y social.

En 1882 Thomas Alva Edison abrió la primera central eléctrica moderna en Nueva York. La primera central eléctrica española se abre en 1875, en Barcelona y con la posterior creación de la Sociedad Española de Electricidad en 1881, en la misma ciudad.

 Girona inauguró la red de alumbrado público urbano, en 1886, aunque Comillas -Cantabria- fue la primera en empezar a usar electricidad en sus calles unos años antes, en 1881 en 1879 cuando la luz eléctrica es un hecho en las farolas y candelabros de Madrid. La Compañía Sevillana de Electricidad fue fundada en 1894.

El nacimiento de Sevillana de Electricidad en 1894 fue una de las operaciones bancarias e industriales más sofisticadas del momento, no solo en España, sino en Europa.

Pueblos andaluces con electricidad en 1900. Se observa cómo entonces la zona más dinámica en el proceso de electrificación es la campiña del valle del Guadalquivir. En 1900 la provincia que cuenta con mayor número de municipios con alumbrado eléctrico es Jaén con 24 localidades, seguida de Sevilla con 17, Córdoba con 14 y Cádiz con 13.

En torno a la electricidad se originó el que llegó pronto a ser el primer subsector industrial del país y también de Andalucía, con una gran proliferación de empresas locales y de capitales extranjeros.

El 1 de enero de 1900, al amanecer del siglo XX, las calles de Marchena brillaron con la luz eléctrica por vez primera. El júbilo inundó la ciudad, con vivas a la luz eléctrica y la banda musical celebrando el histórico momento por las calles.

El gerente de la Sociedad Anónima Eléctrica de Marchena, Roque Vasco Armero, que habia sido Alcalde de Fuentes de Andalucia y erapropietario del agua potable que consumían los marcheneros cerró acuerdos  con Marchena y Paradas para el suministro eléctrico. Este avance no estuvo exento de discusiones y desacuerdos entre las autoridades municipales sobre cómo debía ser la instalación, si aérea o subterránea.

A pesar de este triunfo, la situación financiera de la Sociedad Eléctrica de Marchena fue precaria, lo que llevó a su fusión con la Compañía General de Centrales Eléctricas de Bilbao. Además, es notable destacar la labor de Roque Vasco Armero, quien no solo fue clave en la llegada de la electricidad, sino que también contribuyó al suministro de agua potable en Marchena.

A finales del siglo XIX, la revolución industrial y tecnológica comenzaba a iluminar las calles de las ciudades europeas. Marchena no se quedó atrás en ese proceso de modernización. El año 1899 marcó un punto de inflexión para esta ciudad, así como para su vecina Paradas.

Durante la sesión ordinaria del 5 de julio de ese año de 1899 había poco dinero en el Ayuntamineto por lo que se debatía sobre la cantidad de bujías -puntos de luz- a instalar y su correspondiente coste.

El principal desafío técnico fue el alto voltaje que generaba la máquina de la luz. El inspector municipal, don José Ruiz de Quijano, alertó sobre los riesgos que esto suponía, comparando con estándares internacionales y locales. La seguridad de los vecinos era primordial, y las recomendaciones del señor Fernández Ternero reflejaban la preocupación compartida de todos.

Antes, ya existia la luz en las calles pero no eléctrica sino con bugias de aceite.  El 8 de octubre de 1868, se inaugura el ferrocarril en Marchena para honrar a la República con misa en San Juan, reparto de 5000 libras de pan, actuación de la banda de música, suelta de un toro de cuerda, reparto de 200 reales a los familiares de las víctimas por la «Revolución Gloriosa», iluminación nocturna con luces de aceite, comida y refresco en el Ayuntamiento.

EL ALUMBRADO DE ACEITE

Antes de la llegada alumbrado eléctrico, Ecija recibía a luz a través de bujías (bastoncillo cilíndrico, de cera con una mecha, o con mechas alimentadas de aceite.

El primer alumbrado público de Ecija se instaló en nuestra Ciudad el año de 1844, con 238 faroles de reverbero, distribuidos por el casco urbano, alimentados con aceite, que requería el trabajo de diez hombres según consta de las actas capitulares del Excmo. Ayuntamiento de Écija.

La fábrica de electricidad de Ecija se abre en 1897 y era la empresa Aguas del Guadalquivir de la provincia de Sevilla,  aprovechaba un salto de agua del Genil para generar electricidad propiedad de Ángel Baldomero Custodio Fernández