Belén Rubiano es una marchenera que tras estudiar en el IES Isidro Arcenegui decide irse a Sevilla y comienza a trabajar en una librería donde no se lo pudieron fácil y con los años consiguió tener su propia librería en la Plaza Rialto, que dirigió durante cinco años hasta que tuvo que cerrar.
Este jueves 24 de octubre a las 19 horas con motivo del Dia de las Bibliotecas se presenta en la Biblioteca de Marchena, el libro Rialto 11, «Naufragio y precios de una librería» de Belén Rubiano, presentada por Eva Romero Valderas.
Previamente, de seis a siete de la tarde la autora estará firmando libros en Librería Pruna.
El libro, editado por «Libros del asteroide», una de las más prestigiosas editoriales en cuanto a la calidad de las obras, se vende ya con notable éxito en toda España y Portugal mientras que su autora está presentando el libro también por todo el país.
Es un libro que se bebe más que se lee. No es una novela sino un libro de memorias en torno al mundo del libro, y destaca por su calidad literaria. En el libro se recogen una serie de anécdotas de una librera, que hacen reflexionar, y que que nos deja frases que se clavan en la memoria como dardos. Aunque es un libro ameno y divertido de leer tiene un trasfondo agridulce por las vivencias que relata y que gustará sobre todo a los amantes del mundo del libro.
En Rialto, 11 (Libros del Asteroide, 2019), Belén Rubiano recoge parte de sus vivencias como librera, pero lejos de perpetuar la visión más romántica del oficio, la autora nos muestra también sus mayores retos y dificultades. Tras cinco años de actividad, Rubiano apagó definitivamente las luces de su librería, situada en la plaza del Rialto de Sevilla, al no poder hacer frente a las deudas. Pero en en este libro, que ya va por su segunda edición, la autora nos muestra también la parte más delirante y satisfactoria de trabajar entre libros.
En la sucesión de vivencias que conforman estas deliciosas memorias parciales, Rubiano comparte con los lectores la insobornable vocación que le llevó a establecerse como librera en una esquina del mapa. Y lo hace con humor y con cándida sinceridad, porque salvo la satisfacción de trabajar entre libros y lectores entendemos desde el principio que nada es como había soñado y que en el oficio no faltan tormentas, marejadas y amargas decepciones. Pero también hay, afortunadamente, momentos delirantes, impagables lecciones y grandes alegrías.