En 2014 se fundó la logia Antonio Machado, con sede en Marchena y Sevilla
José Antonio Suárez López
En 2014 se fundó la logia Antonio Machado, con sede en Marchena y Sevilla recogiendo la tradición de los numerosos y activos masones de Marchena de finales del XIX.
Formará parte del Gran Consejo de la Gran Logia Simbólica Española (GLSE), y por primera vez una logia, la Ariadna acogerá hombres y mujeres, ya que hasta ahora solo permitía la entrada a hombres. De hecho una mujer, Ascensión Tejerina, ex Gran Maestra de la GLSE, será una de su cabezas visibles.
Su primer presidente será José Luis Cobos, con una trayectoria de más de treinta años en distintas logias. Igualmente, y Javier Otaola, también ex Gran Maestro y autor de libros de referencia para la Masonería en lengua española.
Las logias masónicas de Marchena
El 21 de junio de 2014, se abrió la Logia Antonio Machado, del Gran Oriente de Francia, con sede en Marchena y Sevilla, cuyo primer acto fue un homenaje a Emilio Castelar.
La masonería es una asociación aconfesional y apolítica que acoge personas de cualquier religión, ideas políticas, clase social, nacionalidad o etnia. La masonería cree en un principio superior al que denomina Gran Arquitecto del Universo pero sin interferir en las ideas religiosas de sus miembros. La masonería nace de los antiguos constructores medievales de catedrales y edificios sagrados y para sus enseñanzas utiliza símbolos y alegorías antiguas muchas veces originados en el propio arte de los canteros.
En Marchena existieron a finales del siglo XIX tres logias masónicas, según el profesor Leandro Álvarez Rey: Hijos de la Caridad nº 320, Martia nº 385 y la Julián Gayarre nº 58.
De estas tres, destaca la Logia Martia, que se convertiría en la más importante de los pueblos de la provincia, con más de un centenar de miembros dirigida por Louis Alfred Coullaut, ingeniero de ferrocarriles y autor del Puente Mamedra, y Julio Piron.
Fundaron el semanario «El Distrito de Marchena», para luchar contra los caciques locales que pronto asaltaron de la redacción y sus redactores acabaron juzgados por delitos de injurias. Denunciaron los lugares donde se practicaba el juego en la localidad, especialmente los varios casinos. Fundaron la primera escuela laica, la «Sociedad de Amigos del Estudio», un pequeño centro de instrucción inaugurado en 1891, con una biblioteca y clases de primera y segunda enseñanza para hijos de los artesanos de Marchena y un coste 1670,25 ptas. abonadas por masones de toda España.