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La obra en el Tiro deja aislados a los habitantes del cerro de La Mota

Los habitantes del cerro de la Mota se quejan del aislamiento que sufren desde el pasado Miércoles cuando dieron inicio de obras de cambio de pavimento en el Tiro de Santa María, único acceso para vehículos a motor. La obra se prolongará por espacio de varios meses. 

Desde el Miércoles y hasta nuevo aviso no pueden entrar vehículos a motor ni ambulancias ni otros vehículos de emergencia, a pesar de residir en la zona personas mayores enfermas. Para una evacuación de urgencia en la zona la única opción que existe a día de hoy es un helicóptero. Esto supone que los habitantes de la zona están literalmente aislados y que no se les informó previamente, de forma que pudieran buscar soluciones alternativas. 

Esto supone que los habitantes del cerro de la Mota han visto sin previo aviso dificultada su vida cotidiana. Los vecinos no se quejan de que se hagan obras que al final ellos mismos serán los primeros en disfrutar sino «de la forma en que la están haciendo» sin tiempo para buscarse alternativas y sin poder hacer su vida cotidiana. También existe malestar por la ausencia de control arqueológico y patrimonial de expertos sobre unas obras hechas en una zona del máximo valor histórico ya que el Ayuntamiento considera que no es necesario que haya arqueólogos en la obra. 

Por este motivo algunos vecinos han decidido reunirse con el Ayuntamiento esta misma mañana y exponerles hasta qué punto las obras condicionan su vida cotidiana y de momento se ha decidido habilitar una pasarela de madera para que los vecinos puedan salir y entrar por el Tiro para lo más necesario. En dicha reunión los vecinos han reclamado del Ayuntamiento que les muestre el plan de seguridad, evacuación y emergencias de la obra que el Ayuntamiento se ha negado a mostrarles según la versión vecinal y que solicitarán por escrito. 

Preocupa a los vecinos especialmente la situación de algunas personas mayores de la zona que en el caso de emergencia o enfermedad no podrían ser atendidos al no poder acceder las ambulancias y vehículos de emergencia en las próximas semanas. Igualmente les han planteado la ausencia de iluminación nocturna en la zona de la escalinata de acceso, necesaria para casos de emergencia. Igualmente las obras impiden el paso de personas en silla de ruedas. También hay personas que tienen citas médicas y que no podrán ser recogidos por las ambulancias no tampoco podrán subir los bomberos. 

A día de hoy la única vía de comunicación para los vecinos es la escalera junto a la Puerta de Carmona, con fuerte desnivel, que se ha convertido en su cordón umbilical. 

Las monjas de Santa María no pueden entregar sus pedidos de dulces, ni recibir huéspedes en su hospedería, salvo que quieran subir con sus maletas por la mencionada escalera. Su sustento y su forma de vida se ven así amenazados ya que subsisten de la Hospedería y de la venta de dulces, de los pedidos que les llegan y que ahora no podrán atender con la acostumbrada puntualidad si no pueden recibir las materias primas. 

Las monjas franciscanas de Santa María se ven obligadas a subir o bajar las compras de comida que necesitan para el mantenimiento de la comunidad o de la hospedería por la mencionada escalera secundaria.

Igualmente no pueden dar salida a los dulces que producen en su obrador debido a que las furgonetas de reparto no pueden acceder a la explanada de Santa María al estar el único acceso en obras y con la entrada de vehículos a motor prohibida. 

Además afecta a los clientes que se hospedan a los hospedería del convento, uno de los tres establecimientos turísticos de nuestra localidad ya que los pocos clientes que tienen se quejan de que no pueden llegar a la hospedería con las maletas, al tener que subir cargados con las maletas por la escalera.  La situación económica del Convento de Santa María es precaria y tienen que recibir suministros del Banco de Alimentos de Sevilla para poder subsistir. 

Igualmente las obras dificultan el acceso al templo de Santa María donde los miembros de la Hermandad de la Soledad acuden y se reúnen semanalmente  y que tampoco pueden acceder con sus vehículos a la explanada de Santa María como solían hacer. 

 Entre los proyectos de futuro que el Ayuntamiento tiene para la explanada de Santa María están la creación de un aparcamiento en la explanada sobre viviendas históricas destruidas o la construcción de un ascensor o plataforma metálica para subir al torreón almohade de la Puerta de Carmona en una estructura adosada a este monumento BIC.