La Peña Flamenca organió ayer una exaltación a la Saeta. El motivo de esta III Exaltación del rezo hecho Saeta, fue el reconocimiento a Luis Fuentes Sevillano por su aportación a la memoria y tradición incontestable a la Semana Santa Marchenera.
Dicho reconocimiento, fue precedido de la Escuela de Saetas de la Cuidad de Utrera, que dirigida por Consolación Garcia, hizo poner en situación de Semana Santa, a través de la Saeta, a un público entregado, por su elegante y profunda exposición de los distintos estilos de saetas.
Fueron diez Saeteros de la vecina Utrera, quienes le pusieron realidad y forma cristalina a la verdad de la pasión del rezo cantado en forma de Saeta. Todos y cada uno de ellos, en los diferentes estilos, lo dieron todo poniendo en práctica verdadera, todo lo que Consolación iba narrando con una exquisita prosa poética.
Impagable la entrega y el sentimiento que Utrera puso en esta exaltación y el respeto que la exaltadora manifestó a la tradición Saetera de Marchena, siempre poniéndola en valor en muchos momentos de su exposición. Consolación puso el broche de Oro al elenco saetero cantando una Saeta ejemplificadora que pasaba por muchos de los estilos, con una voz extraordinariamente medida y rematada de manera increíble por todos los remates posibles, seguiriyas, tonás, martinetes…. con una aportación personal llena de limpieza y matices, que levantó al público entregado al final de su rezo hecho Saeta Grande.
El presidente de la Peña, Juan Reyes destacó que Juan Fuentes es «una voz condecorada con una insignia marchenera, que sale del corazón en Semana Santa, que no tiene ancla, porque siempre navega, que si tiene vela, que con el viento de su pueblo recorre la madrugá de los viernes santos de Marchena, mirando a las estrellas».
«Luis como todos los niños de su época, y también de la mía, nació en una España muy marcada musicalmente por el flamenco y la copla. Por aquel entonces, no había mucha variedad musical y se escuchaba en todas las casas, aquellas extrañas cajitas, las llamadas cintas…. donde estaban encerradas las voces de los aquellos grandes artistas, y que salían a la luz sorprendiendo al oído a través de aquel mágico magnetofón que todas las familias tenían, y que tanto disfrutaban en los momentos libres que dejaban aquellas duras jornadas de trabajo en el campo» destacó Juan Reyes.
Luis, nace en una familia aficionada al flamenco su padre, Justo, su tía Maravilla y su Prima Pastora, eran los cantaores de la familia en los bautizos y comuniones, donde ya Luisito hacia sus pinitos como cantaor en esas reuniones familiares. La afición a la Saeta de Luis, le viene de su Padre. Luis, salía con él, y con su tía Maravilla, los Domingos de Resurrección para recorrer las iglesias cantando Saetas.
Un hito a destacar de Luis como Saetero, es su formación en la Escuela de Saetas de Marchena, a la cual, le reconoce su gran labor por cultivar la saeta, por todo lo ha hecho esa escuela, por mantener vivo este singular arte de rezar.
Para nuestro homenajeado la Saeta, es un rezo que se le hace a la imagen, se pone enfrente de ella y es su única fuente de inspiración. No es partidario de los balcones, prefiere la calle, estar entre la gente que siente la pasión de cristo y todo aquello que le rodea.
Luis es un Saetero amplio, interpreta las Saetas por seguiriyas, carceleras, todas las cuartas y quintas de las hermandades de Marchena, pero tiene especial predilección por las marcheneras rematadas por martinetes.
Luis es una persona, que a pesar de que le han llovido las oportunidades, nunca ha cobrado por cantar, ha participado en innumerables actos benéficos, todo lo ha hecho siempre por convicción y de manera altruista, se confiesa un enamorado de la Semana Santa, que no tiene ninguna vinculación con ninguna hermandad porque se considera de todas.
La distinción a Luis se le entregó Antonio Hidalgo, Vicepresidente de la Peña, después de que la hija del homenajeado, Marisa, le dedicará unas emotivas palabras y una grandísima Saeta. El acto formal terminó como no puede ser de otra manera con una impresionante Saeta cantada por Luis Fuentes Sevilla, el merecido homenajeado de esta exaltación.
Para el anecdotario de la Peña, en la trastienda de este gran día, queda una saeta cantada por Jose Manuel González, recordando a Miguel “El nazareno”… ¡increíble José Manuel!……, como tiras el cante hacia atrás y dejas en el aire un suspiro afinado y a tiempo.
Juan Reyes. Peña Flamenca de Marchena.