Los trabajadores del Centro de Menores de Marchena afirman que la saturación de este verano provocada por la llegada masiva de inmigrantes es excepcional, lo que se apartea de las versiones oficiales, que argumentan que se trata de fenómenos cíclicos estivales. Piden mas recursos para atender mejores a los menores migrantes. «Estan tratando a los niños como ganado».
Además dichos trabajadores que han protestado hoy a las puertas del centro echan de menos coordinación y prevención con otras administración como la sanitaria o la municipal para coordinar los sistemas socio anitarios cuando llegaban los menores a Marchena directamente desde las pateras, sujetos a protocolos sanitarios sin que haya habido «coordinación ni prevención», denuncian.
«Este año ha sido mayor que ningún año, se preveía, pero este año se ha multiplicado por cuatro», de hecho el centro está preparado para 25 menores y ha llegado a tener 80. «Nosotros tenemos 25 plazas para menores de protección y empiezan a llegar menores no acompañados, que ya teníamos «Menas» del año pasado totalmente integrados, con recursos de formación profesional y estaba todo encauzado. Antes de finalizar el curso comenzaron a llegar tres o cuatro Menas diarios y empezamos a vernos desbordados, en junio y julio llegamos a tener 98 menores en agosto sin recursos materiales ni humanos, al estar en verano las plazas solo se cubren al 70% sin poder atenderlos dignamente».
Ayer llegó una orden del Viceconsejero anunciando el traslado de los Menas a un centro específico para ellos «sabemos que hay 170 Menas en un centro de Guillena, no sabemos muy bien en qué condiciones, esto genera en los menores una inquitud, cuando se les dice que hay que trasladarlos se quejan y a veces se escapan, y duermen en los parques y nosotros no podemos atenderlos».
Cuando llega un menor de un CAIT «llega con unos protocolos abiertos, nosotros nos hemos encontrado sin nada, no hemos podido abrir una ficha sanitaria porque estos niños vienen indocumentados» de hecho muchos de ellos se cree que no son menores, porque no se les ha poddido hacer las pruebas óseas de indetificación de edad. «No se les ha vacunado, no le ha visto ningún médico, en el centro de salud los atienden pero sin el debido protocolo» destinado a la detección de posibles enfermedades que ya han sido erradicadas en Europa pero se mantienen en Africa.
Los trabajadores del Centro de Menores echan de menos una coordinación municipal con los recursos sanitarios ante esta situación excepcional «hemos actuado como centro de atención inmediata que no lo somos, acogiendo a niños que venían en pateras en una situación lamentable. Lo primero es una situación con el Centro de Salud y aquí nadie se ha coordinado con nadie. Ha habido falta de previsión y prevención».
«Esto es un centro residencial donde hay niños de protección a los que se ha estado desatendiendo porque una persona que tiene que estar para ocho menores está para veinticuatro y eso es imposible de atender».
La Junta de Andalucia mantiene que al ser niños hay que acogerlos a todos y esa es la línea que están siguiendo y que van a seguir.