Roque Balduque es conocido por sus notables Cristos, entre ellos el Cristo de la Vera Cruz en Alcalá del Río y el Cristo de Veracruz de Lebrija, cuyo contrato de ejecución fue hallado en 2023, demostrando la importancia de su obra en la escultura religiosa del siglo XVI en Sevilla y su influencia más allá.
Tras un meticuloso proceso de restauración, la imagen de la Virgen de Gracia, que se conserva en San Agustin de Marchena, una obra maestra del Renacimiento atribuida a Roque Balduque, será repuesta al culto después de Semana Santa. La intervención, financiada en gran medida por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, ha revelado detalles fascinantes sobre las técnicas policromadas originales. Cerca del altar, se instalarán paneles informativos para enriquecer la experiencia de los visitantes, ofreciendo un vistazo a la historia, técnica y restauración de esta imagen.
La imagen de Nuestra Señora de Gracia, fue realizada en 1558, es notable por su técnica policromada al estilo de la media creta, típica del Renacimiento flamenco. Su estado de conservación era precario, pero recientemente se restauró con el apoyo de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, revelando hasta tres capas de policromía sucesivas. Este proceso ha reafirmado la atribución de la obra a Balduque, a pesar de las múltiples intervenciones a lo largo de los siglos que dificultaron la conservación de la policromía original.
Nuestra Señora de Gracia fue hecha por lo que Balduque de madera de ciprés y no hay documentación sobre esta pieza y tras la restauración de Paloma Maza se sabe que está policromada con la técnica de la media Creta, típica de las imágenes flamencas del Renacimiento en Flandes. Se terminó de restaurar en Noviembre del año pasado con fondos de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía consiguiendo una ayuda del 80% y 20 restante sufragada por el convento de San Agustín de Mercedario Descalzos.
La observación de muestras de policromía y la aplicación de diversas técnicas químicas lreveló durante la restauración de la existencia de hasta tres policromías sucesivas correspondientes a capas de preparación. Gracias a estos análisis se ha podido constatar que la primera capa tiene una preparación de creta y cola animal y sobre ella una oleosa que la encuadra en una policromía europea del siglo XVI, lo que según Paloma Maza permite afirmar que la imagen es obra de Roque Balduque.
Presentaba una cicatriz en la cara por haber sido retirada la mascarilla para insertarle globos oculares de vidrio.