Ayer se inauguró el centro cultural y taller artístico LaSeat en un taller mecánico abandonado por iniciativa del pintor marchenero Quique Sanz que acaba de pasar por la Fundación Antonio Gala y sigue creciendo artísticamente en calidad y madurez.
La apertura del centro cultural supuso la expresión palpable del talento que brota desde siempre en nuestro pueblo desde todas las disciplinas artísticas, pintura, fotografía música, flamenco: en Marchena la creatividad y el arte brotan por doquier. A los cuadros de Quique Sanz se unieron los sones de La Bejazz en directo, todo un lujo merced a la colaboración entre el grupo marchenero de flamenco jazz y el pintor que ha hecho la portada de su último disco Raíces, que se presenta en septiembre en Marchena. Además hubo disc jokeys como Wassa Loud o Mde Mafia.
Quique Sanz expuso que «simplemente me hacía falta un espacio en condiciones, porque antes trabajaba en casa de mi abuela, en la típica habitación de sobra, y eso ya no se adaptaba a mi porque cuando venía un cliente o tenía que hablar con alguien lo tenía que llevar a casa de mi abuela». «Pensé que si me quedaba en Marchena podía conseguir un sitio en condiciones, o me iba a una ciudad donde podría tener un espacio mediocre».
«Fundamentalmente este es mi estudio, y también cuando tenga claro que voy a estar aquí viviendo daré clases particulares y aprovecharé para organizar desde conferencias, exposiciones con otros artistas, conciertos, como un espacio cultural alternativo» expuso Quique Sanz. «Cada vez se están dando más este tipo de espacios donde gente con ganas monta su espacio y lo aprovecha al máximo y disfrutarlo y ofrecer algo más alternativo a lo que estamos acostumbrados» expresó Quique Sanz.
Actualmente tiene muchos encargos especialmente en Marchena, y tras su paso por la Fundación Antonio Gala, donde fue seleccionado entre miles de pintores, el interés por este pintor ha crecido dentro y fuera de nuestra localidad. «Me van saliendo encargos sobre todo aquí en el pueblo, empiezo a tener clientes que cuando me encargan algo suelen repetir y me van pidiendo más piezas, y me están comprando obra personal. Además me estoy centrando en las becas y los concursos que es lo que me da visibilidad de cara al mundo del arte» dijo Quique Sanz.
«Desde que he salido de la Fundación Antonio Gala no he pintado más porque han sido ocho meses intensos y tenía que reposar un poco, y ahora seguiré pintando el mismo proyecto que estaba haciendo allí, más becas, y echar todo lo que pueda». La mayoría de las obras que ha pintado en la Fundación Antonio Gala están expuestas en la propia sede cordobesa de la Fundación Gala.
«Mi paso por la Fundación me ha aportado dedicación, seriedad, echarle muchas horas a la pintura. Allí dentro ya eres un pintor y todo el que viene de fuera a verte ya te trata de verdad como un pintor y tu coges tu rutina de pintar mañana y tarde. He aprovechado mi paso por la Fundación para hacer trabajo personal y el resto investigar por mi cuenta de otros temas que se despeguen un poco de mi línea de trabajo y así enriquecerme más. Actualmente mi línea de trabajo se centra en la materia, investigar el lenguaje pictórico, saber cómo funciona, cómo actúa, etc».
«Busco ir madurando la obra y que el siguiente cuadro pueda ser más maduro que el anterior y que con el tiempo pueda hacer una obra con la que yo pueda decir esto es lo que yo buscaba».