Cuando La Bejazz presenta nuevo disco en Marchena se alinean los planetas, y se reunirán las musas y el arte, como cuando Camaron cantaba en la Venta de Vargas o la Jurado en Chipiona. El clan de Javier Carmona presenta este Jueves Tierra de Luz en la Sala Carreras dentro del festival de jazz marchenero.
Es su sexto álbum de La Bejazz y se llama «Tierra de luz», nombre Inspirado en el «Romancero del Cante Jondo» de Federico García Lorca, El álbum celebra el centenario del nacimiento del poeta. Incluye colaboraciones de la cantaora Esperanza Fernández, las monjas clarisas de Santa María, y «Son del Manchón».
El líder del grupo, Javier Carmona, destaca la fusión de jazz flamenco y música africana en el disco, y la participación especial de las monjas en la canción «Mwanga».
La grabación se realizó en los Estudios Domi de Morón, con una excepción en la iglesia del convento de Santa María. La portada es obra del pintor Jacques Guidon. El álbum, producido por Schimun Murk y masterizado en Nueva York.
Como buen artista con ramalazo gitano La Bejazz anda por el camino del corazón sobre estos poemas que Federico hizo sobre el universo flamenco. El camino del corazón es el del conocimiento y la sabiduría que es el mismo que anduvo Lorca. En la Falseta de la Muerte de la Petenera Federico advirtió de «los que tienen el corazón en la cabeza» gente siniestra que «va apestando la tierra» traducido al lenguaje de Machado.
Dicen los maestros que no hay trabajo más importante para el crecimiento de un hombre que el de caminar del cerebro al corazón. Lorca es flamenco y es como el flamenco.
Como el flamenco, los versos de Federico son dagas que atraviesan el velo de la mentira y que buscan en la verdad una fuente cristalina. Aunque lo mataron el tiempo lo hizo nuevo y en sus versos nos dejó una puerta hacia lo eterno. Es decir, la puerta que trasciende y hace grande al arte.
Aunque el disco se grabó a finales del año pasado en los Estudios Domi de Morón, hay una excepción. La grabación de la canción interpretada por las monjas se hizo dentro de la propia iglesia del convento de Santa María hasta donde se desplazaron los equipos técnicos. La relación de los Carmona con las Clarisas es amplia y antigua. Pilar Carmona, hermana de Javier ha sido muchos años directora del coro, mientras que los hermanos Carmona, fueron los músicos de los discos de villancicos grabados por las Clarisas.
Además de Mwanga, Pablo Carmona ha compuesto para este disco Lapislázuli dedicado a su hermana Isabel Carmona, pianista. En Lapislázuli ha intervenido una sección de cuerda de la Orquesta Sinfónica de Sevilla. Pablo también es autor de La Niña de los Lunares, un Tango interpretado en el disco por la cantaora Esperanza Fernández.
Javier Carmona es autor de Gotas de Nácar, un poema de amor, cantado en el disco por Las Manchonas, que es así como Javier Carmona llama a «Son del Manchón», es decir Marta y Carmen Ponce y Ana y María Dorado.
El guitarrista Melchor Chico es el autor de dos temas del disco, uno dedicado a su hija Martina, y otro «A mi abuelo Melchor», dedicado al gran guitarrista marchenero. Retales son melodías de Melchor Chico y Javier Carmona hijo, que también ha compuesto los Tangos de la Alegría que abre y cierra con las risas de su hija de dos años de edad.