El Ayuntamiento de Sevilla, ha iniciado los trabajos de la última fase de restauración de las esculturas de las Victorias Aladas de la Plaza de América, en el Parque de María Luisa. En esta ocasión, son cinco de las dieciséis obras existentes sobre columnas –tres de ellas del artista Manuel Delgado Branckenbury, una de Pedro Carbonell y otra de Lorenzo Coullaut Valera– las que se someterán a una minuciosa intervención, cuyo presupuesto de licitación alcanza los 128.278,98 euros.
Ayer se procedió a la bajada de esas esculturas de sus respectivos pedestales en forma de columnas para ser trasladadas a los talleres de la empresa especializada Dédalo, Bienes Culturales S.L., adjudicataria del contrato.
En concreto, los trabajos actuales sobre cinco Victorias Aladas, con seis meses de plazo de ejecución, consistirán primero en un estudio pormenorizado sobre cada escultura y después la realización tratamientos biocidas, la limpieza mecánica de superficies y química; consolidación para las superficies alteradas; reposición de los morteros en juntas según original; reintegraciones de mortero; cosido y sellado de grietas y pegado de fragmentos, y tratamientos hidrofugantes y antigrafitti, sin que alteren la superficie.
Para las labores de reintegración de piezas perdidas y su reconstrucción, primero se procederá al modelado de las mismas en arcilla siguiendo los modelos originales y la realización de moldes en silicona. Después, tras ejecutar las pruebas de color, un taller especializado reproducirá estas piezas en resina acrílica y fibra de vidrio o material similar que sea resistente a la intemperie y que no presente reducción de su tamaño al secar. Por último, se anclarán las reproducciones a las esculturas con fibra de vidrio y resina resistente a los rayos UV, se procederá a una entonación cromática que iguale toda la superficie tanto de las esculturas como de los capiteles y se aplicarán tratamientos hidrofugantes y antigrafitis.
Entre las piezas perdidas de estas Victorias Aladas destacan cabezas, brazos, alas y coronas, que se habrán de reproducirse tras un trabajo histórico e infográfico. En general, todas estas esculturas –al igual que las anteriormente restauradas– presentan una degradación causada por los agentes meteorológicos, sobre todo humedad y lluvia, que han causado fisuras, fragmentaciones y desgastes de la piedra.
Las Victorias Aladas
La Plaza de América fue proyectada por Aníbal González en el año 1912 con algunas variaciones introducidas en 1914. La ornamentación se completa con el conjunto de esculturas de Victorias Aladas, semejantes a las de la Exposición de Turín de 1911, y que rematan las columnas de los ocho bancos corridos que delimitan el amplio espacio rectangular de la Plaza de América. En total son 16 Victorias Aladas, con distintos elementos alegóricos (escudo y espada, corona de laurel, cuerno de la abundancia, antorcha, flores, paleta de pintura, rueda dentada, etc.). Y de ellas, seis las realizó Coullaut Valera, otras tantas, Delgado Branckenbury, y las otras cuatro, Pedro Carbonell.