La Consejería de Fomento iniciará las obras a principios del próximo año con una inversión de 8,5 millones de euros
La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda iniciará entre finales de año y principios de 2024 la reparación integral del firme en 21 kilómetros de la A-92 en la provincia de Sevilla. Los trabajos se van a desarrollar en uno de los tramos más deteriorados de la autovía, entre los términos de Arahal y Paradas, y para su mejora se emplearán mezclas asfálticas sostenibles (Masai), que son menos contaminantes y más respetuosas con el medio ambiente.
“No paramos en la recuperación de una autovía que acumulaba demasiados años sin una reparación integral”, ha manifestado la consejera de Fomento, Rocío Díaz, que ha insistido que en apenas año y medio se han adjudicado contratos “para el arreglo integral de 78 kilómetros de la A-92”. “Sin lugar a dudas estamos ante la mayor inversión en conservación que ha recibido esta autovía en su historia y eso es gracias a que el Gobierno andaluz ha encontrado soluciones sostenibles que han permitido a su vez captar fondos europeos”, ha añadido la consejera. Andalucía es, de hecho, la única comunidad que ha recibido fondos React-EU para mejorar su red viaria.
Tras intervenir el pasado verano en los 14 kilómetros de la autovía A-92 entre Sevilla y Alcalá e Guadaíra, la Consejería de Fomento ha adjudicado por 8,5 millones de euros otros dos lotes. El primero de ellos, que es el más próximo a Arahal y abarca 11 kilómetros (del PK 37 al 48) se ha adjudicado a Martín Casillas por 4.538.469 euros., El segundo tramo, que va a continuación con un trazado de diez kilómetros hasta las proximidades de La Puebla de Cazalla, se han encargado los trabajos a Eiffage Infraestructura con una inversión de 3.908.471 euros.
Los trabajos se van a realizar sobre un tramo por el que circulan una media de 25.000 vehículos diarios (13% de ellos tráfico pesado). Se reforzará el firme para rehabilitarlo estructuralmente y, con ello, corregir los desperfectos de la vía y mejorar su seguridad vial. Además, se extenderá una nueva capa de rodadura tanto en el tronco de autovía como en los ramales de acceso y salida de la autovía, así como de las vías de servicio de ambas márgenes de la autovía localizadas en el tramo.
En los tramos del tronco de autovía en donde el firme se encuentra muy deteriorado se procederá a realizar un fresado de ocho centímetros de espesor y reposición con ocho centímetros de mezcla bituminosa en semicaliente (Masai II). De igual manera, se ha proyectado la reposición de toda la señalización horizontal, tanto en el tronco de la autovía como en los ramales de los enlaces. Se completará la señalización horizontal con la ejecución, en la banda izquierda y en la banda derecha, de ambas calzadas de la autovía, de huellas sonoras. También se sustituirá la señalización vertical que se encuentra en mal estado, así como algún cartel de lamas.
La principal novedad de la reparación integral de la A-92 está en es el uso de Materiales Asfálticos Sostenibles Automatizados e Inteligentes (Masai), que la Junta de Andalucía utiliza en colaboración con la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad de Granada. Los Masai son mezclas bituminosas producidas a temperatura máxima de 140 grados y con características singulares, como que al menos el 20% del peso es material fresado procedente de carreteras deterioradas o el 0,5% de material reutilizado como polvo de neumáticos.
La denominación del nuevo material asfáltico hace honor a la tribu Masai asentada en el este de África. Para sus miembros, la tierra y todos sus elementos son sagrados y por ello se niegan a degradarla. Su supervivencia depende de la salud y fortaleza de la naturaleza de su entorno y de aprovechar al máximo todo lo que ésta les proporciona, no generando ningún residuo. Este es el espíritu principal de los nuevos materiales Masai: reutilizar, reciclar y valorizar productos ya preexistentes, incluso de la propia carretera, de forma que no se sobreexploten los recursos naturales, además de imponer nuevas técnicas de producción que permitan reducir drásticamente la temperatura de fabricación lo que conllevará menores consumos de combustibles fósiles y, por ende, una reducción notable de las emisiones durante su fabricación.