Quico Chirino: «Sevilla debe creerse a sus autores, promocionarlos y buscarles su espacio».
José Antonio Suárez López
El periodista y escritor de Osuna, Quico Chirino presentará este martes 17 de octubre en la Casa de la Ciencia de Sevilla Sevilla a las 20,00 horas, su primer libro ‘A la izquierda del padre’ (Samarcanda).
Chirino defiende en declaraciones a Europa Press que «Sevilla debe creerse a sus autores, promocionarles y buscarles su espacio. Es una oportunidad para crear un gran festival», agrega. Chirino ha participado en el Festival Granada Noir y la próxima semana estará en Getafe Negro.
En su opinión novelas como ‘A la izquierda del padre’ o película como ‘Grupo 7’ o ‘La Isla Mínima’ y ‘Una chaqueta tirada en el césped’, de Jorge Molina suponen un repunte del género negro sevillano.
La trama ambientada en 1988 en El Vacie, es un pretexto para hacer una reflexión sobre el periodismo y los medios de comunicación. Chirino comenzó en el periodismo colaborando con la prensa local de Osuna, (Osuna Información) y luego en El Correo de Andalucía. De allí saltó a Granada donde es actualmente jefe de local de Ideal.
La novela también denuncia el hecho de que en 2017, todavía 500 personas vivan en El Vacie «a pocos minutos andando del Parlamento de Andalucía» con lo que eso representa.
Además reflexiona sobre el periodismo. «En la novela se observa cómo evoluciona una información, cuántos enfoques puede tener y cómo se administran los tiempos en función de distintos intereses. A veces, en el periodismo se pueden hacer más trampas que en una novela» señala en declaraciones a Europa Press.
Siempre le interesó la literatura casi tanto como el periodismo y al final de su carrera hizo una tesis sobre Paco Umbral. Posteriormente se conviertió en doctor en Periodismo por la Universidad de Sevilla. Y además según él mismo confiesa en una entrevista a TG7 bebe de García Márquez ya que en su novela al igual que en «Crónica de una muerte anunciada» lo de menos es quien es el autor de las muertes, sino como se cuenta y se desarrolla el relato.
Se declara admirador de Juan Marsé y por supuesto de Paco Umbral donde pervive una larga tradición española que bebe del periodismo y la literatura a partes iguales.