El Hospital de la Merced de Osuna ha implantado un nuevo sistema de radiografía de alta precisión, la tomosíntesis digital de tórax, que valora la afectación pulmonar en pacientes con COVID-19. El centro refuerza de esta manera las necesidades específicas de imagen radiológica en la lucha contra la epidemia del coronavirus.
El primer estudio realizado con esta técnica a un paciente afectado de coronavirus, o con sospecha de estar infectado, se realizó el pasado 12 de marzo.
La tomosíntesis, que se lleva a cabo con dosis bajas de rayos X, aumenta sustancialmente la precisión diagnóstica radiológica, con niveles superiores a la radiografía convencional y comparables a los que se consigue mediante un TAC. Algo que resulta de gran valor para el manejo clínico del paciente.
Además, el empleo de esta técnica hace posible la disponibilidad de medios diagnósticos a un coste asumible y facilita la caracterización epidemiológica del brote, detectando mejor la existencia de afectación pulmonar.
Por otro lado, en el Hospital de la Merced han corroborado que la tomosíntesis simplifica el trabajo al radiólogo, garantizando la optimización de la dosis administrada al paciente.
La radiología se ha convertido en un elemento clave en el manejo del paciente con COVID-19 o con sospecha de ser positivos, ya que ayuda a tomar decisiones en procesos como el ingreso hospitalario, el tipo de tratamiento o el traslado a UCI.