La comunidad de franciscanas clarisas de Marchena está celebración porque el pasado 24 de marzo se cumplieron 400 años de la fundación del convento de la Purísima Concepción, que tuvo lugar en 1624 por los Duques de Arco. El lema escogido para este IV centenario es ‘Creed siempre en el amor de Dios y en la caridad recíproca’, recordando una cita de santa Clara de Asís.
La abadesa, sor Ana María Nyilu, ha agradecido a Dios, en nombre de toda la comunidad, “la generosidad de enviar vocaciones contemplativas durante cuatro siglos, de modo que día a día y en todo momento, suben al cielo nuestras oraciones y sacrificios, de alabanza y reparación, de amor y servicio, a Dios y a la humanidad entera”.
Para celebrar este aniversario e inaugurar este cuarto centenario, el obispo auxiliar de Sevilla, monseñor Ramón Valdivia, presidirá la Eucaristía el próximo sábado, 20 de abril, a las doce del mediodía, en la iglesia de Santa María de la Mota, de la localidad.
En un día imbuido de historia y espiritualidad, el convento de clarisas de Santa María celebró el pasado Jueves un hito impresionante: el cuarto centenario de su fundación. Para conmemorar estos 400 años de devoción y servicio, la comunidad de hermanas presentó un disco especial titulado «400 años de amor», en una ceremonia que fue tanto una celebración de su rico pasado como una mirada esperanzada hacia el futuro y que ta está a la venta en el propio convento.
La entrada a la capilla conventual resonó a las seis de la tarde de ayer Jueves con vibrantes ritmos de Madagascar, un saludo musical que preparó el terreno para lo que sería una jornada de alegría y gratitud compartida. No solo los ritmos, sino también los cantos en suajili de Kenia, llenaron el espacio, destacando la universalidad de la fe que las hermanas profesan.
Sor Susana, la superiora del convento, abrió el evento con unas palabras profundamente conmovedoras sobre el significado de este aniversario. Explicó cómo la figura de Santa Clara, quien se sintió “elegida, llamada, preferida y amada” por el Señor, sigue siendo una fuente de inspiración para la comunidad. En su discurso, Sor Susana tejió conexiones entre la vida de Santa Clara y las vidas de las hermanas actuales, mostrando cómo la iniciativa amorosa de Dios se manifiesta continuamente en sus vocaciones.
La presentación del disco fue el centro de la celebración. «400 años de amor» consta de catorce canciones interpretadas por las hermanas, cada una reflejando una faceta de su jornada espiritual y su amor por Dios. Estos cantos no solo son expresiones de fe, sino también actos de agradecimiento por las innumerables bendiciones recibidas a lo largo de los siglos.
El disco, disponible para adquisición directamente en el convento, representa un testimonio tangible de la historia y el espíritu del lugar. Se convierte así en un recuerdo especial para los visitantes y fieles, un eco de la celebración que resuena más allá de los muros del convento.
Mientras el evento llegaba a su fin, el sentimiento de comunidad y gratitud era evidente en cada rostro. Las hermanas y los asistentes compartieron no solo música y oraciones, sino también historias y recuerdos, tejiendo aún más fuerte el tejido de su fraternidad.