El Taller Verde ha solicitado a la Consejería de Transición Energética de la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Marchena que rechace cualquier autorización, licencia o permiso para la ejecución de la planta solar fotovoltaica que debe autorizar el Ministerio de Transición Ecológica y va a ocupar el 5% del término de Marchena. No se descartan movilizaciones en el municipio para protestar por este proyecto.
«Nosotros como ecologistas estamos muy a favor de las energías renovables, nuestra oposición va porque estos proyectos super grandes, que tienen un impacto sobre el terreno terrible, el dinero es de fuera, que viene a explotar nuestros recursos naturales y abogamos por una expansión de energías renovables basadas en pequeñas explotaciones comunitarias que produzcan la energía que se va a consumir lo más cerca posible, y que los propietarios de la tierra obtengan beneficios y también la comunidad» indica Mérida.
En España se ubican ya los dos parques fotovoltaicos más grandes de Europa. Son la megaplanta de Usagre (Badajoz), llamada Núñez de Balboa, de 500 megavatios, que ocupa 1.000 hectáreas y la de Mula (Murcia) de 495 megavatios. «La Planta Solar proyectada en Marchena es muchísimo mayor que éstas: 680 MWp, 1.700 ha de superficie y 80 km de perímetro. Esto supone un verdadero atentado a nuestro territorio y a sus valores sociales, naturales y culturales» expone el Taller Verde.
El proyecto atraviesa el Corbones, el arroyo Salado, y tienen un perímetro de 83 kilómetros de malla perimetral y se ubica en una zona cercana a la ZEPA, zona de especial protección de aves.
«Una vez más, este modelo beneficia a los grandes inversores y especuladores nacionales y extranjeros en detrimento de la eficiencia energética y del acceso a las energías limpias por parte de la ciudadanía. Y por si fuera poco limita el acceso a la red de las pequeñas instalaciones de autoconsumo» expone Taller Verde.
Mérida recuerda que «en ese espacio no se podrá cazar, no se podrá pasear, la biodiversidad se verá afectada de una forma directa».
«Creemos que es profundamente injusto que las comunidades rurales tengan que llevarse la peor parte de la transición energética que pretende ser sostenible pero que finalmente vuelve a reproducir las lógicas de expolio como hace 60 años hizo con nuestras costas y playas el desarrollismo turístico. Además, una vez más, este modelo beneficia a los grandes inversores y especuladores nacionales y extranjeros en detrimento de la eficiencia energética y del acceso a las energías limpias por parte de la ciudadanía. Y por si fuera poco limita el acceso a la red de las pequeñas instalaciones de autoconsumo» expone el Taller Verde en su documento de alegaciones.
UNA TRANSFORMACION DE LA ECONOMÍA Y EL PAISAJE DEL MUNICIPIO
Este proyecto supondrá una radical transformación del paisaje agrario de Marchena. «De esas 1729 hectáreas más de 340 corresponden a olivar que serían desmontadas y más de mil son de secano» expone Antonio Mérida del Taller Verde, que ha presentado una serie de alegaciones al proyecto ante la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento, que por el momento se declara «no competente sobre el tema» indica Mérida. «De tener una actividad económica basada en la agricultura, todo ese suelo agrícola se va a transformar en suelo industrial y habrá que ver qué puestos de trabajo se van a crear» indica Mérida.
Taller Verde defiende un «modelo distribuido basado en aproximar la generación de energía a los centros de consumo y en la gestión de la demanda, ahorrando inversiones, costes y abaratando el precio de la energía para la población, fomentando la flexibilidad del sistema eléctrico a través del autoconsumo en los tejados de edificios públicos, de polígonos industriales y viviendas».