El Taller Verde denuncia en un comunicado que las obras de remodelación de las Pistas de Atletismo “Miguelete” «ponen en riesgo la vida de 51 árboles adultos (olmos)» por lo que recuerda que los árboles « son seres vivos, que sacados de su entorno natural, dependen de nuestros cuidados para su supervivencia y son nuestros vecinos y amigos».
Ayer y hoy, como cada semana en verano los voluntarios del Taller Verde están regando los 700 árboles plantados este año en la Vía Verde para dar sombra a este camino que comunica Marchena con Córdoba. Numerosas asociciones han sembrado árboles este año en dicha Via Verde atendiendo a la llamada del Taller Verde con la intención de dotar de sombra a esta instalación bajo el eslógan «por una via más verde». Hacen un llamamiento a participar a todo el que quiera ayudar a regar que desde las seis estarán en la Via Verde.
Recuerda que los árboles deben ser tratados, «de forma individual y analizando sus circunstancias concienzudamente antes de proceder a su muerte. Nunca deberán ser considerados como unos elementos más del mobiliario urbano que se quitan y se ponen según convenga. En este sentido, cuando asistimos al sacrificio de árboles que “estorban”, “ensucian”, “destrozan”, “molestan”,… poniéndose por delante cualquier justificación práctica antes que la vida del árbol, debe entristecernos como seres humanos, porque además, en la mayoría de los casos, los árboles son víctimas de una mala gestión de quienes los plantaron».
Esta asociación reconoce que «puntualmente es necesario cortar y arrancar árboles en el casco urbano, este hecho no debe mermar en absoluto el patrimonio forestal del pueblo. Por tanto, habría que aplicar la norma: “A árbol arrancado, árbol plantado, o más” opina Taller Verde.
Afirma que «el proyecto de actuación podría permitir la supervivencia de algunos ejemplares de olmo. Habría que estudiar detenida e individualmente la situación de cada uno de ellos a fin de que permita salvar los que no sean incompatibles con las obras. Un árbol es una vida».
Además señala que «una vez arrancados los árboles afectados, exigimos que se realice un nuevo proyecto de reforestación con especies adecuadas, que podría contemplar la presencia de árboles de hoja perenne como encinas y algarrobos y arbustos mediterráneos como laureles, lentiscos o aladiernos. Deberían disponer de instalación de riego que permita su normal desarrollo. En definitiva, una nueva actuación de revegetación que aporte belleza, sombra y salud a esta instalación deportiva».