A partir del jueves 17, y al menos hasta el lunes 21, se espera que la Península se vea afectada por una amplia borrasca, inusual para esa época del año, que dejará precipitaciones abundantes, así como un descenso progresivo de las temperaturas, especialmente de las diurnas. La borrasca se encuentra en estos momentos sobre el Atlántico, al noroeste de Galicia, intensificándose a medida que se desplaza hacia el sur.
A pesar de la distancia la atmósfera peninsular comienza a inestabilizarse, como se puso de manifiesto con las tormentas que ya se produjeron ayer lunes 14, y que continuarán desarrollándose de forma dispersa durante hoy martes y mañana miércoles.
A partir del jueves es muy probable que la borrasca esté lo suficientemente próxima a la Península como para que penetre el primer frente, que afectará al extremo occidental. Además del frente, el aumento de la inestabilidad y la gran cantidad de humedad de origen subtropical captada por la propia borrasca, favorecerán que se produzcan chubascos en gran parte de la Península, localmente fuertes y acompañados de tormentas y granizo. Posiblemente este día el área mediterránea será la zona menos afectada.
Se espera que el viernes el centro de la borrasca cambie de dirección y se dirija primero hacia el este, alcanzando el sur de Portugal y, posteriormente, durante el fin de semana, se traslade de sur a norte recorriendo el extremo occidental peninsular. Los frentes irán entrando en la Península por el suroeste generalizando las precipitaciones y, al ir acompañados de intervalos de viento fuerte de componente sur, seguramente serán persistentes en las laderas sur de los sistemas montañosos.
A partir del lunes es probable que la borrasca se aleje por el Cantábrico.
Debido a la incertidumbre que existe en la trayectoria de la borrasca, se recomienda consultar las predicciones actualizadas ya que un pequeño cambio puede modificar sensiblemente las zonas afectadas.