Los caminos de huida de 1936 por la campiña se han convertido hoy en caminos de memoria
José Antonio Suárez López
Recordar la desbandá de Málaga en 1936, es el objetivo de la marca a pie para recordar la desbandá celebrada hoy con salida del Parque Luchadores por la Libertad de Fuentes de Andalucía, y llegada a la Plaza de la Memoria de Marchena.
Muchas personas de la campiña sevillana usaron la ruta de huída hacia Málaga a pié para escapar del avance franquista.
Tras el golpe de Estado hubo miles de detenciones de todas aquellas personas consideradas contrarias a los golpistas con miles de muertos junto a las tapias de los cementerios. Quienes pudieron escapar de una muerte segura, emprendieron rápidamente la huida hacia lugares más seguros.
En la provincia de Sevilla las ocupaciones se extendieron con rapidez durante los primeros diez días, a excepción de una parte de la Sierra Sur, limítrofe con el noroeste de Málaga. En Córdoba, la resistencia permaneció meses en varios pueblos. Por tanto, la huida de miles de personas de La Campiña sevillana se dirigió principalmente hacia esas zonas más cercanas de retaguardia republicana.
Quienes lo hicieron hacia Málaga a través de la Sierra Sur sufrieron meses después una nueva huida, la Desbandá. Desde la segunda semana de enero de 1937 los barcos y aviones golpistas comenzaron a bombardear sistemáticamente la ciudad, quedando como única salida la carretera de Almería.
La resistencia republicana se mantuvo hasta el mismo día 7 de feberro de 1937 en el que 150.000 personas comenzaron a huir aterrorizadas bajo el fuego cruzado de los barcos y de ametrallamientos aéreos, en los que murieron más de 5.000 personas. Desde 2007 una marcha recorre aquel camino recordando la Desbandá y a quienes la sufrieron.
Este año 2020, la Asamblea de Familiares y Asociaciones ‘La Gavidia’, la Asamblea Andaluza de Entidades Memorialistas y Víctimas del Franquismo y los Ayuntamientos de Fuentes de Andalucía y Marchena han organizado y convocado un nuevo tramo de esta marcha, con la idea de «que hagamos un esfuerzo colectivo para que en cada rincón se recoja el legado de aquellas generaciones que tanto dieron a cambio de nada», en la necesidad de «educar frente al olvido injusto», así como «ampliar la dimensión andaluza que tuvo aquella masacre en las distintas provincias».