El ajo molinero es un plato típico de invierno en Marchena, pero también en Paradas, Arcos de la Frontera y otros pueblos de la Sierra de Cádiz que tiene su propio refrán: ni ajo molinero hervío ni mujer de otro marío. Y este refrán viene a que es una sopa que hay calentar lo suficiente pero no dejar que hierva porque se estropearía.
Foto. Blog cocina andaluza.
El ajo molinero y la sopa de tomate son dos platos que tienen en común la gastronomía tradicional de Marchena y Arcos de la Frontera y que en Arcos tienen unas jornadas gastronómicas.
Antiguamente las familias de campo que no tenían dinero y trabajaban en el campo, solían aprovechar el pan que sobraba de un día para otro y que se pone duro para hacer comidas reconstituyentes, igual que el gazpacho en verano. Las verduras podían salir de sus propios huertos y los pastores solían tomarlas por los campos por donde pasaban.
El ajo molinero es una sopa caliente elaborado a base de aceite de oliva, pan, sal, pimientos rojo y verde, naranja agria, un toque de ñora, un poco de tomate y, por supuesto, ajo en abundancia. Es una receta popularizada por los pastores que iban tomando lo que veían en los huertos, principalmente productos de temporada. Un Plato típico y campesino con muchas calorías e hidratos de carbono, que sin duda servía para fortalecer a los campesinos de cara a las largas jornadas en el campo.
lleva pan troceado con dos dientes de Ajo pelados y pimientos choriceros. Se escurre el Pan para que suelte el Agua. Se pelan los pimientos. Se maja el pan, ajos y los pimientos. Poco a poco le vamos añadiendo el Aceite de Oliva. Queda una pasta fina. Se pone agua a hervir y cuando rompa a hervir se le añade el majado. Por ultimo hay que remover dejar que se asiente y poner el zumo de dos naranjas y sal.