Cuando en 1545, Juan Téllez Girón, IV conde de Ureña (1498-1558), fundó la capilla del Santo Sepulcro debajo de la capilla mayor de la colegiata de Osuna como capilla funeraria de su familia ordenó que no sonara música extranjera y que los compositores fueran españoles como Peñalosa, Escobar, Pastrana, Basurto, Pedro de Porto, Anton Marlete, Pedro Fernández, Castilleja, Morales con la salvedad del francés de moda Jean Mouton que componia misas.
Incrementó el personal de músicos de la capilla con el organista, un maestro de capilla, cuatro cantores (tiple, contralto, tenor y bajo) y dos seises.
El Duque era Camarero mayor del emperador Carlos V y tío el duque de Arcos, quien era mecenas de Cristóbal de Morales, a quien trajo a Marchena a vivir.
Cristóbal de Morales compuso una misa de réquiem para Juan Téllez Girón, la Missa pro defunctis a 4 voces, que pudo ser interpretada en los funerales del conde, el 19 de mayo de 1558 y enterrado en la capilla del Santo Sepulcro según escribe Juan Bermudo, en su Declaración de instrumentos musicales (Osuna: Juan de León, 1555).
Su biógrafo Gerónimo Gudiel escribió que en el entirro estaban su hijo Pedro Giron, Pedro Fajardo su yerno, marques de los Velez, el duque de Arcos don Luis Ponce de Leon y muchos prelados de las ordenes de toda el Andalucia, «en ombros destos señores y prelados con pompa y larga procession de clerigos y religiosos Dominicos, Franciscos, Agustinos, Carmelitas, Minimos y de la tercera orden, cercado de todos sus criados y principales personas de su estado del Andaluzia: no faltando el collegio y vniversidad de Ossuna».
El Duque ordena «que el tiple que no sea capado porque todos cantan de mala gana sino que sea tiple mudado y que tenga gentil voz y cante de buen aire y se menee con gracia y con algunos quiebros en la voz ya que no tenga garganta, el cual dicho tiple siendo buena pieza se le disimularán estas faltas y defectos que van declarados que son los siguientes:
Fue elegido Cristóbal Villacarbín por maestro de capilla para que administre y rija el facistol «sin dar codazos ni palmadas en el libro como lo acostumbran hacer otros maestros de capilla desconcertados y de mal oído el cual dicho salario será doce mil maravedís en cada año.
Juan Trillo capellán cobraba seis mil maravedís como contralto, Pedro Gallardo capellán seis mil maravedís, Antón Díaz, capellán de coro de la iglesia mayor, diez mil maravedís por contrabajo de la capilla del Santo Sepulcro, dos mochachos de buenas voces que sepan canto de órgano ocho mil maravedís.
Fuente:
Archivo Histórico de la Nobleza. Osuna, C. 1513, D. 186-224; Gudiel, Jerónimo, Compendio de algunas historias de España, donde se tratan muchas antigüedades dignas de memoria, y especialmente se da noticia de la antigua familia de los Girones, y de otros muchos linajes… Alcalá de Henares: Juan Íñiguez de Lequerica, 1577, 121v.