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En 1855 dejó de celebrarse la Feria de Marchena por la epidemia de cólera

El Ayuntamiento de Marchena solicita a a la Corona permiso para celebrar una feria en 1829, pero se aprueba en 1832, aunque nuestro pueblo no hace uso de dicha licencia hasta 1836, por no tener fondos.

De nuevo la feria se aprueba para finales de septiembre pero en 1839 se traslada a la fecha actual y aparece publicado el anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia de Sevilla.

El Ayuntamiento pagaba al Estado 500 reales anuales lo que en sus inicios la puso en peligro pues era una cantidad grande. En 1855 dejó de celebrarse por la epidemia de cólera y se consolida a finales del XIX y principios del XX. Alrededor de 4500 cabezas de ganado se reunían en la feria marchenera entre la Muralla y la estación de Renfe, aprovechando la abundancia de agua del baño de los caballos.

Podía comprarse una vaca por 1200 reales y los cerdos a 66 reales la arroba. En los barracones y tenderetes se vendían juguetes, dulces y figuras de cera. En 1883 se vendieron sobre todo ovejas y cerdos y mucho menos vacas, informa El Liberal de Madrid (9-9-1883). En 1889 aún estaba en pié el Palacio Ducal y los baños (1830) visita obligada de turistas y forasteros.

COMERCIO DE GANADO

Los gitanos siempre tuvieron un papel fundamental en la compraventa de ganado en la feria. Como muestra esta anécdota encontrada en la prensa de la época.

Un padre mandó a su hijo a comprar un borrico á la Feria de Marchena, dicíéndole : Mira, hijo, procura comprarlo con la cabeza grande. El muchacho llegó á la feria y se acercó a un vendedor de cuadrúpedos; gitano asolapado, de color de ala de mosca, de voz ronca y aguarden
tosa. -A ver un burro, le dijo. Aquí tié uzté uno que ni el ferrocarril.

Este tiene la cabeza muy chica. -Zorritoó… Tráete er pelao, dijo el gitano á un hijo suyo que estaba á poca distancia-. El chaval echó á correr y trajo al poco rato un burro con toda la cabeza hinchada, por una enfermedad. -Vamos, que ezta es una alhaja. No parece mal, pero tiene la cabeza chica. -Compare, exclamó el gitano. -¿Uzté busca un burro ó un apóstol?
(El Periódico para todos. Madrid. 1/1/1875, n.º 1, página 16).

Después de la feria medieval, que se celebraba desde hace 624 años aprobada por Rey Enrique IV de Castilla, Trastámara hermano de Isabel La Católica en 1394, no hay más noticias históricas de la Feria de Marchena hasta 1836 cuando se reorganiza de nuevo esta feria.

Lo que sucedió entre 1394 y 1836 con la feria no se sabe por no existir documentos hasta la fecha.