La Guardia Civil ha investigado a dos personas por su supuesta implicación en los delitos de robo y falsedad documental tras ser sorprendidas con 630 kilos de aceitunas que transportaban en una furgoneta en un dispositivo activado entre Carmona y Marchena.
Una vez verificada la carga del vehículo, observaron que almacenaba bolsas de grandes dimensiones que contenía aceitunas. Tras pedir la documentación pertinente de trazabilidad y tras la sospecha de que el mismo pudiera estar falsificado, se procedió a la activación del equipo Roca, especializado en los robos en el campo, según informa en una nota de prensa.
Los agentes, tras analizar el documento, verificaron que era fraudulento, y centraron la investigación en hallar el lugar donde, supuestamente, se habían extraído las aceitunas de forma ilegal, que finalmente resultó que procedían de una finca de Osuna y a cuyo agricultor le fue devuelta la mercancía.
El precio en el mercado de los 630 kilos de aceitunas recuperadas ascienden a mil euros, aunque la pérdida para los agricultores en este tipo de robos suele ser mayor debido a los daños que se provocan en los olivos y el gasto de su conservación.