Siete personas asistieron al concierto del cuarteto de viento L´Harmonie Nouvelle en la tarde del viernes en la Sala Carreras, con inicio a las nueve de la noche, cuando se jugaba el primer partido del mundial de fútbol España-Portugal.
El cuarteto de viento se caracteriza por interpretar música de finales del XVIII e inicios del XIX, sobre un repertorio de Obras de Rossini, Boccherini y Jadin con réplicas de instrumentos originales, de la misma época en que se compuso la música que habitualmente no se utilizan. El concierto forma parte de La Escena Encendida ciclo cultural de la Diputación de Sevilla en Marchena.
El cuarteto de viento está formado por Luis Castillo, catedrático de Fagot del Conservatorio superior de música de Sevilla, Vicente Giner catedrático de trompa en el Conservatorio Superior de Música de Sevilla, Pepe Benítez, profesor de clarinete en el Conservatorio Francisco Guerrero de Sevilla, y Antonia Molina profesora de flauta clásica, en el Conservatorio Superior Cristóbal de Morales de Sevilla.
Luis Castillo formó parte del grupo de música de capilla que acompañó a Jesús Nazareno la pasada madrugada del Viernes Santo en Marchena.
El trabajo de este grupo de caracteriza por su trabajo de investigación y recuperación de instrumentos antiguos, originales de cada época. Ya que no pueden tocar con los instrumentos antiguos debido a su alto precio, tocan con réplicas para acercarse lo más posible al esípritu original de cada composición.
Por ejemplo en el repertorio desarrollado en Marchena sonó la trompa del XIX que no tiene vávulas y las notas se consiguen a base de modular con los labios y colocar la mano de una forma u otra sobre el pabellón de salida del sonido, lo cual hace mucho más difícil el control. Tal y como explicó Vicente Giner se le llama el isntrumernto de Dios porque «soñlo Dios sabe la música que saldrá».
