Los ayuntamientos en su conjunto fueron, una vez más, los principales responsables de las actuaciones y proyectos de obras públicas desarrollados en Sevilla y provincia en 2023 según el informe anual de Ceacop la patronal de la obra pública que ha publicado hoy su informe anual.
Los ayuntamientos sevillanos fueron el año pasado los más inversores de toda Andalucía, solo por detrás de los consistorios malagueños.
Por volumen económico, la capital encabeza el ranking con gran diferencia sobre el resto (76 millones), pese a experimentar un descenso del 43% con respecto a 2022. A continuación, aparece Dos Hermanas con 11,2 millones, una cifra que queda muy lejos de los 55 millones del ejercicio anterior. Le siguen Alcalá de Guadaíra y La Rinconada, con 11 y 6,7 millones, respectivamente.
El retroceso en la inversión en obra pública en Sevilla por segundo año consecutivo, situándose por debajo de los 500 millones debido a una caída del 17%, contrasta con el ligero crecimiento observado en el conjunto de Andalucía, donde el volumen de adjudicaciones ha repuntado un 3,3%, alcanzando los 3.548 millones de euros. Este escenario refleja una tendencia preocupante en Sevilla, pero también resalta la resiliencia y la capacidad de crecimiento en otras áreas de Andalucía.
La distribución de la inversión muestra un panorama variado entre las diferentes administraciones, donde el Gobierno central lidera con una inversión de 1.350 millones, seguido por los ayuntamientos y la Junta de Andalucía con 1.012 y 968 millones, respectivamente. El incremento significativo del Gobierno central contrasta con las reducciones observadas en otras áreas, especialmente en las universidades, diputaciones y consistorios.
Analizando las inversiones por provincias, es notable cómo Cádiz encabeza la lista con 777,6 millones de euros, seguido de Málaga y Sevilla. Sin embargo, Sevilla experimenta un descenso significativo por segundo año consecutivo, reflejando una situación de desinversión preocupante que podría tener implicaciones en el desarrollo futuro y la calidad de vida de sus habitantes.
La caída en la inversión en Sevilla es especialmente marcada en los ayuntamientos, que han recortado su inversión en un 36%. Este dato es alarmante, ya que los ayuntamientos han sido tradicionalmente los principales impulsores de proyectos y actuaciones en la provincia. Este retroceso en la inversión pública requiere una reflexión profunda sobre las prioridades y estrategias de desarrollo local.
La reacción del sector, representada por CEACOP, subraya la necesidad de aumentar la inversión en obra pública para acercarse a los niveles previos a la crisis económica, considerando además el factor inflación. La preocupación sobre la participación de la empresa andaluza en los contratos adjudicados es otro aspecto crítico, destacando una disminución en la adjudicación de contratos a compañías locales, lo que afecta negativamente al tejido empresarial andaluz y, por ende, a su capacidad para generar riqueza y empleo.
Esta situación invita a una reflexión sobre la necesidad de políticas que fomenten una mayor inversión en obra pública, especialmente en Sevilla, así como estrategias que promuevan la participación de empresas locales en dichas inversiones. Se hace evidente la importancia de un enfoque equilibrado que garantice el desarrollo y bienestar de todas las provincias andaluzas, promoviendo así un crecimiento inclusivo y sostenible en toda la región.