Javier de Mingo arquitecto, y máster en conservación del Patrimonio cuenta en su blog Albanécar cómo el secretismo era la forma en que se transmitían los conocimientos en la carpintería y albañilería en la época de Diego López de Arenas.
El maestro enseñaba el oficio verbalmente a su aprendiz, por lo que el único escrito que queda es el tratado de Diego López de Arenas, carpintero y maestro alarife marchenero del siglo XVII.
En su tratado se describe cómo hacer una cubierta de par y nudillo con un cartabón de armadura recogiendo el saber de su época.
Diego López de Arenas fue bautizado en San Sebastián como Diego García según investigación de Manuel Antonio Ramos Suárez, en la Revista Archivo Hispalense.
Cuando alguien hoy día tiene que hacer o restaurar un artesonado tiene que leer a Diego López de Arenas. López de ArenaS escribió el primer tratado de Carpintería de lo Blanco que se convirtió en fuente para el estudio de futuros aprendices y maestros del gremio de carpinteros y permitió perpetuar las estructuras mudéjares durante el barroco y llevarlas hasta América según expone Rafael López Guzmán en el trabajo «Carpintería y arquitectura mudéjar tras la expulsión de los moriscos» en las actas del Simposio Internacional de mudejarismo de Teruel.
Sabiendo cuál es la altura que ha de salvar la techumbre en cuestión, el primer objetivo es realizar un cartabón con los ángulos y longitudes necesarios para servir de módulo elemental, estableciendo con ella una pendiente de cubierta. Lo más usual para dicha pendiente era usar el denominado cartabón de cinco -36 grados de inclinación-.
FASE II: DIMENSIONADO DEL CARTABÓN DE ARMADURA Y MODULACIÓN
La anchura resultante del cartabón no podía ser demasiado grande para su fácil manejo, ni demasiado pequeño, pues cualquier error en su ejecución se multiplicaba tantas veces como el propio divisor. De ahí que el doce soliera cumplir todas las condiciones con solvencia.
En función de la altura de la estancia medida en pies, asigna un determinado grueso de madera en forma de fracción de vara.
Esta regla a veces no era seguida, y en su lugar se establecía un ángulo de corte igual a la bisectriz entre ambas piezas, quedando así del mismo alto las dos, pero debilitando el par en exceso al tener una amplia garganta, motivo por el cual se usaba más la primera regla.
FASE VI: ESTRIBOS, TIRANTES Y CAJEADOS
Arenas da exclusivamente las dimensiones que ha de tener el cajeado de los estribos en la unión con los tirantes. A su vez, los tirantes también deben tener una sección generosa para reducir, más que nada, su deformación a largo plazo.
Convento de Santa Paula (Sevilla). Armadura de par y nudillo (1617-1623). Diego Lopez de Arenas
Toajas Roger apùnta que trabajaría para los Duques en el Palacio Ducal. Sabemos que su famoso tratado, cuyos contenido y alcance ha sido desvelado recientemente por Enrique Nuere, realizando unos modelos informáticos, fue impreso por Luis Estupiñán, impresor sevillano que trabajó para la Casa Ducal de Arcos.
El Breve Compendio de la Carpintería de lo Blanco y Tratado de Alarifes Sevilla, de Diego López de Arenas fue impreso por Luis Estupiñán en 1633 en la calle de Las Palmas de Sevilla.También publicó el Teatro de las Religiones del padre Valderrama prior del convento de San Agustín de Sevilla, uno de los conventos más ricos de Sevilla que estuvo pagado y patrocinado y dedicado al Duque de Arcos Rodrigo Ponce de León e ilustrado por miniaturas del grabador Francisco Heylan (1584- 1635).
Según la carta de dote de Juana Bautista su primera mujer dada en Sevilla a 19 de enero de 1602 se sabe que los padres de Diego López de Arenas fueron Pascual García y Beatriz González.
El 3 de febrero de 1576 el bachiller Cristóbal García Colorado bautizó en la parroquia de San Sebastián de Marchena a un niño llamado Diego hijo de Pascual García Calvillo y Beatriz González sus padrinos fueron Francisco Jiménez hijo del Pedro González Román y Leonor de Baeza mujer de Francisco Jiménez.
Su madre Beatriz González se bautizó en San Sebastián el 15 de enero de 1543 siendo sus padres Diego López Gavira y Marina García. Su padre García Calvillo fue bautizado en la misma parroquia el sábado 2 de marzo de 1532.