Pepe Díaz Luque: «Un museo de arte sacro en el convento de Santa María sería un atractivo más para Marchena»
José Antonio Suárez López
Hasta el próximo domingo 20 de Octubre puede verse en el convento de La Concepción (Santa María la Chica) la exposición de obras de arte procedentes del Palacio Ducal organizada por la Asociación de Defensa del Patrimonio de Marchena Acupamar. Una exposición única e irrepetible que ha reunido algunas joyas como pinturas de Ribera y su círculo, grabados de Durero, pinturas de Lucas Jordán, Francisco Pacheco o El Divino Morales.
La muestra ha sido todo un hallazgo para los propios marcheneros y un acierto desde el punto de vista de la divulgación histórica como del turismo, ya que el mismo Palacio era el principal monumento de Marchena antes de desaparecer. Y aún hoy ya desaparecido, las piezas en torno al Palacio son una de las claves para atraer turismo y visitantes hasta Marchena tanto por su importancia histórica -por aquí pasaron Colón, y varios Reyes- como artística.
Esta exposición podría ser el germen de un museo de arte sacro en el seno del propio Convento de la Concepción, de cumplirse con las expectativas de la Asociación Acupamar que sea un nuevo atractivo para Marchena y una nuevo vía de ingresos para la comunidad religiosa que ya cuenta con una hospedería y la venta de dulces.
«Tras la exposición, las piezas volverán a sus lugares de origen los conventos de Marchena, San Andrés, Santa Isabel y San Agustín. Las piezas que son del convento de la Concepción, Santa María la chica, trataremos de concienciar al Convento de crear un museo de arte sacro en el propio convento con todas las piezas que tienen, que no sólo son las que están expuestas, sino otras que tienen guardadas y documentación que tienen bastante, para que sirva como un atractivo cultural y turístico más para Marchena y para el convento de Santa María sea una fuente más de ingresos» explica José María Díaz Luque, presidente de Acupamar.
La muestra está teniendo buena afluencia de público tanto de fuera como de dentro de Marchena. Por la mañana la visitan los distintos centros escolares de la localidad y por la tarde está abierta al público en general. El principal atractivo de la muestra es mostrar las joyas que habitualmente no se pueden ver por estar entre muros de conventos de clausura.
«Lo más complicado ha sido el montaje del cuadro de San Agustín que tiene unas dimensiones de dos metros y sesenta y siete centímetros por uno noventa de ancho. La bajada de ese cuadro desde el coro de San Agustín, su traslado y montaje en el convento de La Concepción» explica José María Díaz Luque presidente de Acupamar, que organiza ésta muestra dentro de sus Jornadas de Patrimonio.