Casi tres años, 36 meses, después el Señor de la Paz y la Virgen de la Palma volvieron a pisar las calles de Marchena a los sones del toque de oración y el réquiem por todas las víctimas del Covid, que por el momento son 21 personas en nuestra localidad y 103.0000 en toda España con 11,6 millones de contagios.
Es lo primero que le dijo el capataz Carlos Hidalgo Vicente a sus costaleros. Después de tres años, aquí estamos de nuevo, vino a decir, mientras la Banda de la Palma cometía los sones de las marchas fúnebres.
Entre los estrenos de este año está la parihuela del señor y el plateado de los varales de la Virgen.El recorrido alternativo elegido por la Hermandad de la Borriquita para sortear las obras de Rojas Marcos hizo que muchas personas se concentraran en la calle Cruz, Méndez Núñez, y Cantillo Madre de Dios alrededor de las siete de la tarde, para desembocar luego en el Pasaje, en medio de una riada humana que en la Calle San Pedro -otra de las novedades del recorrido- se hizo más patente.
Los costaleros han agradecido la reforma del paso que permite más amplitud para los costaleros, con más espacio para que puedan trabajar mejor debajo del paso sobre todo los de la primera. Además el imaginero de Morón Manuel Martín Nieto, autor de la talla del señor de la Paz ha intervenido sobre uno de sus hombros que estaba deteriorado debido a la manipulación de la talla para vestirlo etc.
El recuerdo a los pioneros de la hermandad se inició por la mañana en el cementerio cuando la Banda de la Palma fue al camposanto a realizar una ofrenda al primer director de la banda Sergio Rodríguez Herrera que da nombre al pasaje por el que sale en la hermandad, que de esta forma ocupa un lugar destacado en el corazón cofrade marchenero.
La vara dorada del rector aparece cruzada en la delantera del paso del Señor de la Paz en rector al recién desaparecido Juan Zapico uno de los pilares fundacionales de la Hermandad de la Borriquita.
Mención aparte merece la Banda de la Palma que lo dio todo y le puso todo el alma y el corazón que merecía una ocasión tan destacable e histórica como la vivida hoy.
La cancela de San Agustín que es como las puertas de la Semana Santa o lo que es lo mismo las puertas del cielo cofrade las abrió Elisa Isabel Morejón, -la hermana mayor de la Borriquita- que se ha podido restablecer afortunadamente de una reciente operación hace poco tiempo y que le ha impedido participar en el cortejo con su túnica.
La primera llamada de la Virgen de la Palma fue hecha por tres pregoneros a la vez el pregonero del año pasado Manuel María Roncel, Ana Herrera, pregonera juvenil de este año y Antonio Romero Pintado, el capataz poeta, que habló de las puertas del escalofría para referirse a las del exconvento de San Agustín y destacó el esfuerzo de la Hermana Mayor Elisa Morejón por sacar adelante a la corporación en estos tiempos difíciles y por su rápida recuperación y esfuerzo tras su reciente operación.
El cortejo enfiló la calle Sevilla recibida por la Hermandad de Jesús Nazareno y de San Isidro a las puertas de San Miguel, para luego dirigirse a la calle la Cruz donde le esperaba un barrio engalanado por primera vez para las grandes ocasiones. La obra de la calle Rojas Marcos ha obligado así a la Marchena cofrade a abrir dos nuevas calles en el mapa de los corazones cofrades, Cruz y Méndez Núñez que es el gran estreno de este año para las hermandades de Borriquita y Jesús Nazareno.
