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Andrés López Muñoz, la historia real que inspiró la ficción de Curro Jiménez

Curro Jiménez, el icónico bandolero que muchos han llegado a admirar, se basa en una figura que nunca existió en la realidad histórica. Las fantasías románticas y literarias se entrelazaron para crear la novela «El Barquero de Cantillana.  escrita por Rafael Benítez Caballero en 1894. Esta obra proveyó nombres, fechas y eventos que distan de la verdadera esencia del Barquero de Cantillana.

La serie de televisión Curro Jiménez, que adoptó la novela como inspiración, hizo aún más confusa la verdadera identidad del barquero, presentando una mezcla de diversos bandoleros ficticios, incluyendo figuras como Diego Corrientes y José María el Tempranillo, alejándose del verdadero personaje.

El Barquero de Cantillana auténtico, Andrés López Muñoz, trabajaba junto a su padre cruzando el Guadalquivir en Cantillana. Contrario a la creencia popular de que fue despojado violentamente de su barca, López Muñoz se encontró en problemas después de una pelea con un joven de su edad, lo que llevó a su huida y rebeldía. La Guardia Civil, lo persiguió hasta su trágico fin en noviembre de 1849.

Tras su muerte, nació la leyenda, eclipsando la verdadera identidad de López Muñoz. Antonio García Benítez, en su estudio sobre el bandolerismo, indica cómo el sistema latifundista llevó a actos delictivos variados, desde el robo de ganado hasta los secuestros, destacando la compleja línea entre historia y mito en la figura del Barquero de Cantillana.

La serie Curro Jiménez» se emitió desde el 22 de diciembre de 1976 hasta 1978 en La 1 de TVE t luego se ha venido reponiendo ininterrumpidamente en diversos periodos y ahora se emite diariamente en la 2 de TVE a las once de la noche.

Creada por el dramaturgo uruguayo Antonio Larreta está ambientada en la España del siglo XIX y se basa en el bandolerismo desarrollándose principalmente en la Serranía de Ronda. Sancho Gracia como uno de los actores más demandados de la época, añadió un gran carisma al personaje, lo que contribuyó a su popularidad.

MUSEO DE LOS BANDOLEROS

El Museo del Bandolero, o Centro de Interpretación Galería del Bandolero, de El Borge, en Málaga inaugurado el 23 de febrero de 2023, después de su creación en 1995. En su antigua ubicación en Ronda, registraba una media de 51,000 visitas anuales desde su puesta en marcha. En el museo, se exhiben un total de 1316 piezas que se componen de varios elementos relacionados con el bandolerismo.

Entre las colecciones del museo, se pueden encontrar certificados de búsqueda y captura, fotografías de famosos bandoleros como José María Hinojosa «El Tempranillo», Diego Corrientes Mateos, José Ulloa «Tragabuches» o Francisco Ríos González. También, el museo tiene varias escenificaciones como ‘Mesón’, ‘Secuestro’ y ‘Cueva’, donde los bandoleros están representados con el vestuario propio de la época. Hay una colección de cómics de más de 200 ejemplares fechados alrededor de 1940 que narran la vida de los bandoleros.

LA RUTA DEL TEMPRANILLO

La «Ruta de José María el Tempranillo» recorre los territorios de España donde vivió el famoso bandolero del siglo XIX ofreciendo ruta de forma individual o en grupo, y acceder a varios atractivos a través de un bono turístico. La ruta pasa por Alameda, Badolatosa, Benamejí, Casariche, Corcoya y Jauja, lugares presumiblemente relacionados con la vida y actividades de José María.
En esta ruta, el turista puede visitar lugares como el Centro Temático del Bandidaje Romántico, las Termas Romanas, la Iglesia de la Inmaculada Concepción y el Patio Mausoleo de José María el Tempranillo. Además, hay visitas teatralizadas como una emboscada de bandoleros románticos de la época dentro de un paisaje único.

Natural de Jauja, pedanía de Lucena, El Tempranillo mató a un hombre siendo muy joven. Luego pasó a formar un grupo de bandidos que robaba a los ricos y distribuía la riqueza robada entre los pobres.

CAMINOS DE BANDOLERO

Caminos de Bandoleros recorre los lugares que habitaban estos famosos delincuentes en los siglos XVIII y XIX, permitiendo conocer a bandoleros tan famosos como Diego Corriente, José Ulloa ‘Tragabuches’, José María Hinojosa ‘El Tempranillo’, los ‘Siete niños de Écija’, ‘El Bizco del Borge’, entre otros.

La ruta ofrece una rica experiencia histórica y cultural, con itinerarios que atraviesan pueblos de las sierras de Cádiz y Málaga, así como municipios de las campiñas de Sevilla y Córdoba. Algunos de los lugares que se pueden visitar son Lebrija, Utrera, Osuna, Écija, Montilla, Iznájar Estepa, Medina Sidonia o Ronda.

SIERRA DE CÁDIZ:_ LA SENDA DE LOS BANDOLEROS

La Senda de Bandoleros, tiene cuatro etapas en las que se recorren un total de 80 kilómetros a través de la Sierra de Cádiz viendo castillos y fortalezas que conformaron la frontera occidental del reino nazarí, liego conquistadas por Rodrigo Ponce de León, a quien los Reyes Católicos nombraron señor de las 7 Villas.

Esta Agencia de ecoturismo ubicada en El Bosque, organiza rutas de senderismo por la sierra de Grazalema. Se puede contratar en el teléfono 699 23 93 02m correo  sendabandoleros@gmail.com o web sendabandoleros.com. Esta ruta solo esta disponible en otoño.

 

QUE VER

Los participantes podrán conocer los aljibes de Ubrique, Los Navazos de Villaluenga, valles cerrados o poljes surcadas, a veces, por pequeños cursos de agua y conocer la historia del bandolero José María Hinojosa El Tempranillo , que vivió en 1832 en Grazalema. Su boda, nacimiento de su hijo y muerte de su esposa forman parte de su leyenda así como el lugar donde enterró al cadáver de su esposa, que sigue siendo desconocido.

 

También se recorren espacios como El Pinsapar, un tesoro botánico que se remonta al Terciario, y se recorre el curso del río Majaceite en su tramo desde Benamahoma hasta El Bosque, uno de los senderos más hermosos de todo el parque natural.

Las rutas se celebran de jueves a domingo y cuentan con un aforo limitado de diez personas, siendo seis el mínimo requerido.

Los participantes cuentan con el acompañamiento de 24 horas de un guía y todo está incluido en el precio -330 euros por persona-. Cada participante cuenta además con un pasaporte que va sellando en las distintas etapas.

Llegado el mes de octubre, en Grazalema vuelve a resonar el estruendo de los trabucosy  un intenso olor a la pólvora invade las principales calles y plazas de la localidad.

Recreación de la que participan más de 500 personas, perfectamente ataviadas con trajes de la época (1832), y que plasma en casi medio centenar de representaciones la vida de un bandolero que vivió en la Sierra de Grazalema los momentos más dulces y amargos de su vida: el nacimiento de su hijo y la muerte de su amada, María Jerónima Francés.

LA SERIE CURRO JIMENEZ

La figura del bandolero andaluz está arraigada en la cultura popular por una combinación de factores históricos, literarios y sociales. Este estereotipo ha sido moldeado a lo largo de los años y tiene sus raíces en la realidad histórica y la percepción cultural que rodea a los bandoleros en Andalucía.

Históricamente, los bandoleros andaluces eran vistos como rebeldes contra un orden social injusto. Eric Hobsbawm describió el concepto del «bandido social», un individuo que encarnaba una forma de rebeldía primitiva prerrevolucionaria contra el poder arbitrario de los monarcas, señores feudales y propietarios de tierras. En España, el bandolerismo fue vinculado con la subversión, y existen estudios extensos sobre este tema. Esta visión de los bandoleros como defensores de los oprimidos contribuyó a su popularidad y aceptación en la cultura popular.

Además, la percepción de los bandoleros andaluces fue moldeada en gran medida por los viajeros románticos, quienes crearon y difundieron una imagen exótica y estereotipada de Andalucía, poblada por gitanos, toreros y bandoleros. Esta imagen ha perdurado en el tiempo y se ha arraigado profundamente en el imaginario colectivo sobre Andalucía.

Por otro lado, el bandolerismo en Andalucía, más allá de las figuras míticas y románticas, fue un fenómeno real que tuvo lugar desde mucho antes del fin del Antiguo Régimen y el inicio de la Edad Contemporánea.

Figuras como el Tragabuches, Pasos Largos y Diego Corrientes, aunque ahora son parte del imaginario colectivo de las gentes que habitan algunas de las zonas rurales andaluzas, eran forajidos reales. Este hecho real, junto con la influencia de la literatura y la tradición oral, ha mantenido viva la figura del bandolero en la cultura popular.