La ermita y hospital de San Miguel, el origen del barrio más poblado
José Antonio Suárez López
La talla de San Miguel Arcángel de Marchena de Pedro Roldán está siendo restaurada por el restaurador marchenero José María Calderón para participar en una exposición sobre Roldán en el Museo de Bellas Artes de Sevilla.
El Museo de Bellas Artes de Sevilla prepara una gran muestra sobre el imaginero Pedro Roldán, que se celebrará entre diciembre de 2023 y marzo de 2024 por los 400 años de su nacimiento. La muestra, comisariada por el catedrático de la Universidad de Sevilla José Roda Peña, reunirá obras de uno de los más importantes escultores barrocos, que influyó de manera decisiva en la imaginería sevillana. Serán alrededor de 40 las piezas expuestas en el museo sevillano.
Cada año se conmemoraba el 8 de Mayo la Aparición del Arcángel Miguel, en Monte Gargano, Reino de Nápoles, año 490. Inocencio XIII concede el 11 de agosto de 1723 indulgencias a los confesados y comulgados en la iglesia de San Miguel Arcángel de Marchena apareciendo asi el titulo de dicha iglesia es «de la aparición de San Miguel Arcángel».
En toda España se siguen celebrando fiestas y romerías en honor a San Miguel el ocho de Mayo. Existen refranes que recuerdan esta fecha como «San Miguel de mayo, a labrar, el huerto’.
Luego la Iglesia cambi la fiesta al 29 de septiembre, actual Fiesta de San Miguel co-patrón de Marchena que tuvo una cofradía y hospital desde 1525 en cuya ermita el sacerdote Francisco García daba misas en 1525.
Mmusulmanes, judíos, cristianos y protestantes veneran a San Miguel, que para los judíos es protector de las sinagogas y del pueblo de Israel, y para los cristianos es defensor de la iglesia y de los cristianos, y guía de las almas en el momento de la muerte. La imagen de San Miguel de Marchena es obra de Pedro Roldán, firmada en su espalda. La iglesia es mudéjar reformada tras el terremoto de Lisboa.
Las apariciones de San Miguel en el Monte Gargano fueron tres, 8 de Mayo de 490, 19 de Septiembre de 492 y 29 de Septiembre de 493.
El Ángel del castillo (1753), obra de Peter Anton von Verschaffelt.
En Roma, el papa Gregorio I atajó la peste mediante la invocación de San Miguel, a quien había visto en lo alto del mausoleo de Adriano blandiendo una espada. En la Edad Media el lugar se convirtió en fortaleza: el Castel Sant’Angelo.
A imitación del Santuario de San Miguel en el Monte Gargano los templos a San Miguel se ubican en la cima de los montes como sucedió con Mont Sant Michel de Francia y muchos otros lugares como en Marchena donde corona un cerro que en el momento de la fundación era una ermita en zona despoblada.
En el cerro de San Miguel, el sacerdote Francisco García, habitaba una ermita en 1525, definidia como casilla en los documentos y acogía a enfermos «donde antes vivían unos santeros» celebrando misa en la iglesia por las tardes. En una carta fechada en 1525 pide al Duque la cesión del huerto y ermita de San Miguel ante la oposición de una «cofradía».
En 1525 ya existía la Hermandad de San Miguel según el documento de cesión de unas casas a dicha hermandad que estaban en la calle Santa Clara y calle Torno que eran hasta entonces propiedad de la cofradía de San Pedro Mártir de El Viso del Alcor según documentación conservada en el Archivo Parroquial de San Juan.
En 1545 la Fábrica y Cofradía de San Miguel arrendaron una viña en la vereda Bajonal. Dicha cofradía tenía además casas en la barriada Puerta Ecija que en 1545 fueron arrendados a María de Benjumea. En 1549 cede un solar propiedad de la cofradía e Iglesia de San Miguel a Alonso García Ponce y su hijo. En un censo de 1563 se dice que el Hospital de San Miguel estaba ubicado entre la iglesia y el Molino de viento.
Una parte del clero de Marchena reunido en una cofradía, no se cita cual, enfrentado al clérigo Francisco García, por la posesión de la huerta y ermita de San Miguel, se reunían en la huerta de San Miguel, donde le mostraban su hostilidad de forma que García piensa que lo quieren echar del pueblo y hasta matarlo. Eran ellos los que tenían la llave de la iglesia. En una carta el Duque García afirma que el huerto de San Miguel podría ser un trasunto del huerto de Getsemaní, si la facción contraria llevaba a cabo sus siniestros designios y le daba muerte.
La espada de San Miguel. Sorprende la disposición de siete santuarios en línea recta desde Irlanda hasta Israel: los tres sitios más importantes, Mont Saint Michel en Francia, la Sacra de San Miguel en val de Susa y el santuario de Monte Sant’Angelo en el Gargano están todos a la misma distancia.
En 1550 existía una hermandad y Hospital de San Miguel en un solar propiedad de la iglesia siendo Francisco Florindo presbítero y mayordomo de la hermandad,
Según la documentación conservada en el Archivo Parroquial de San Juan, cuya ubicación estaría entre la iglesia de San Miguel y el Molino de Viento, tal y como refleja el documento titulado «Del Hospital y Cofradía de San Miguel», 1550 en el Legajo 34, folio 3244.
Aparición de San Miguel en Monte Gargano
En Marchena había un molino de viento junto a San Miguel tal y como lo prueba la documentación encontrada por la que el Duque Luis Cristóbal Ponce de León encarga a Maese Pedro Jaus, flamenco vecino de la villa de Sanlúcar de Barrameda que vaya a Flandes y traiga un molino de viento a Marchena.
Luis Cristóbal Ponce de León comandó una escuadra cargada de dinero y de soldados para Flandes, acompañó en su estancia allí a Felipe II, estuvo presente en la Paz de Cateau- Cambrésis (fue uno de los notables españoles que fueron designados por los franceses como garantes del pacto), fue designado como embajador español en la Corte francesa de Carlos IX cuando éste accedió al Trono tras la muerte de Enrique II, y luego, ya en España, estuvo presente en las fastuosas bodas del Rey con Isabel de Valois.
Este molino de viento fue dibujado en 1561 por Joris o George Hoefnaguel, (1542-1600) un joven de apenas 20 años, viajero incansable dibujante y pintor, hijo de un rico comerciante de diamantes de Amberes.
Felipe II le nombró más tarde, en la primavera de 1570, general para la pacificación total de la serranía de Ronda en la guerra con los moriscos, bajo las órdenes del capitán general don Juan de Austria.
«Por carta del Duque mi señor fecha 17 días de diciembre de 1549 años 400 ducados se pagaron que montan 150,000 maravedis de Su Señoría le mandó dar prestados para que vaya a Flandes y traiga su coste y misión un molino de viento de madera para moler el trigo el cual ha de dar puesto en Sanlúcar en fin de septiembre de 1550 y 20 días después desde dicha villa traer a costa del Consejo de esta villa de Marchena».
Cueva de San Miguel en Monte Gargano
Miguel significa: “¿Quién como Dios?” De hecho, ese era su grito de guerra.
San Miguel defiende las almas, tanto en la muerte como en el tránsito, de ahí que aparezca en el ritual de difuntos y en el medievo se le representase pesando almas con una balanza mientras el diablo intenta desequilibrarla.
Los escritos de Sor María de la Antigua mencionan un grupo de corderos, que como almas en pena se dirigían al templo de San Miguel de Marchena.
Santuario de Monte Gargano
En Marchena encontramos imágenes de San Miguel coronando el altar mayor del convento de San Andrés, en la Sala de Juntas del Ayuntamiento, en una pintura donde se dice fue copatrón de Marchena portando un escudo con la Inmaculada. Los escritos de Sor María de la Antigua mencionan a San Miguel de Marchena.
«Después de ayudarla a morir vio a Catalina de Santiago, mujer humilde y santa. Después de muerta la vio en sueños varias veces y otra vez la vio despierta en la iglesia de Santa Clara. Le preguntó cómo le iba y le respondió. “Desque vengáis acá lo sábreis?. ¿Quando lo veréis?. Hincóse de rodillas hácia el Sagrario y dijome. De hoy en quince días”. Salió al claustro (de Santa Clara) y vio unos corderos que eran ánimas del purgatorio que las llevaban camino de la iglesia de San Miguel».
Simbolismo del arcángel Miguel
San Miguel capitán de la milicia celestial en lucha contra el mal, la ignorancia, la inconsciencia y la esclavitud, protege los pensamientos de la negatividad, y lleva una espada de luz espiritual, arma de la verdad con la que romper el velo de la ignorancia.
Un joven, vestido como emperador romano, con coraza anatómica y túnica, imagen difundida en Sevilla por Francisco Pacheco y la escuela de Zurbarán, a raíz de la Contrarreforma. Iconografía creada por Martin de Vos hacia 1580, grabado por Hieronymus Wierix en 1584 e inspirado en el grabado de Durero de Sol-Apolo y Diana. En ella se representa al dios Apolo como al dios Sol, con asociación de cultos solares paganos y el Sol invictus de la Antigüedad tardía según Mario Aguila Vivar.