Más de 70 años de espera para ser Verónica con Jesús Nazareno en Marchena
José Antonio Suárez López
Esperanza Ruiz Hidalgo, será la Verónica de Jesús Nazareno en este 2018.
De todas las figuras simbólicas que salen el Viernes Santo con Jesús la más cercana al Nazareno es la Verónica, mujer santa, que incluso llegó a salir como talla en su propio paso, al igual que San Juan Evangelista confirma el investigador Manuel Antonio Ramos en su investigación sobre el Mandato. Las personas que han vivido esta experiencia cuentan una gran emoción de poder estar cerca del Nazareno y se llevan una grata experiencia que recuerdan de por vida.
El listado de Verónicas se respeta escuruposamente por orden de inscripción y se expone públicamente en la Casa Hermandad de Jesús Nazareno de la calle San Miguel.
Esperanza Ruiz Hidalgo, de 24 años de edad encarnará este 2018 la figura de la Verónica el Viernes Santo. Su padrino la apuntó a la lista de espera al nacer en el 1993. Ahora mismo hay una lista de espera hasta el 2090 para ser Verónica. En total, 72 años informa Enrique Talaverón, investigador de la figura de la Verónica en la Hermandad de Jesús Nazareno.
Foto de Salvador Azpiazu en 1898.
Esperanza Ruiz, hermana y nazarena de la Humildad se transformará en la Verónica en casa de Antonio Calle, calle Carreras siguiendo la tradición ayudada por la vestidora oficial de La Verónica Maria Jesús Arenas que cuida al detalle la figura de la Verónica y la ayuda en todo lo que necesita.
Tendrá que cruzar el próximo Viernes Santo la Plaza Ducal bajo palio acompañada de seis hermanos, subirá a la escalera de metal, y desenrollará entonces el paño donde se habrá quedado grabada la imagen del Nazareno tal y como viene sucediendo desde 1868.
El protocolo de la hermandad marca que la Verónica sea citada como uno de los cargos importantes de la hermandad con su correspondiente nombramiento oficial. Participa en actos oficiales, y su nombre quedará inscrito en los libros de actas. Antes del Viernes Santo la Verónica se acercará a ver al Señor de cerca, para que pueda familiarizarse con él y que no le intimide, ya que los que lo tratan de cerca dicen que el Señor de Marchena impone mucho.
En 1867 la hermandad compró las ropas para la Verónica tras decidir dejar de sacar en procesión la escultura de la Verónica que salió hasta 1867 en un paso independiente informa Manuel Antonio Ramos vestida con manto, saya y velo, una didadema metálica y un lienzo con la imagen de Jesús en la mano.
«En el futuro todas van a tener una edad muy alta y muchas se van a ver obligadas a renunciar por la edad», indica Talaverón, una situación que contrasta con la situaicón vivida en los años 80, cuando nadie quería ser Verónica.
Enrique Talaverón Alfonso, hermano de Jesús Nazareno fue encargado de La Verónica en los 90 en tiempos del rector Federico Martinez. Talaverón organizó en 2016 una exposición sobre la Verónica localizando a todas las que en las últimas siete décadas han ocupado este papel.
Foto Miguel Scott Atoche.
Desde mediados de siglo la familia de José Domiguez El Palmeño, era el encargdo de buscar, inscribir y acompañar a la Verónica según recuerda Enrique Talaverón.
Las Verónicas no tienen porqué ser todas de la Hermandad de Jesús Nazareno defiende Talaverón. «Jesús es del pueblo, ésta tradición la ha hecho el pueblo, no vayamos a cambiar una tradición ahora, pero si es cierto que el 90% de las Verónicas son de la hermandad» explica Talaverón.
A principios de siglo era tradición que la Verónica fuera una mujer joven, adolescente, virgen -representaba a una santa- y de gran belleza y que en principios de siglo iba vestida de seda y terciopelo, es decir con las mejores ropas. Esta ropa suntuaria se conservó hasta los años 20 y desde entonces se las vistió con velo blanco, aunque actualmente va vestida de hebrea desde los años 70.
