Ricardo Reina: «Pablo Aguado arrastra juventud y eso es muy importante»
José Antonio Suárez López
Ricardo Reina, banderillero marchenero ha destacado la buena respuesta de los aficionados locales a la visita del torero Pablo Aguado a quien se ha entregado hoy en el Casino un premio como triunfador de la Feria de Sevilla 2019. «La gente ha respondido bien y de esto se trataba, de que la gente disfrutara del acto» destacó Ricardo Reina.
En la Feria de Abril de Sevilla de 2019 Pablo Aguado cortó cuatro orejas y salió por la Puerta del Príncipe. La Real Maestranza de Caballería de Sevilla, en la edición 55 de sus trofeos, premió la faena de Pablo Aguado a un toro de Jandilla como la mejor de la Feria, acaparando los galardones más importantes y logrando, por primera vez, la unanimidad de los miembros del jurado.
Reina compraba con cinco años revistas taurinas en el quiosco de la Plaza Alvarado junto al Hotel Ponce. Hoy tiene 36 años y vive en Calahora, La Rioja desde 2012, donde se ha casado y se dedica a labores agrícolas y cuando comienza la temporada taurina se convierte en banderillero, dando rienda suelta a su pasión taurina que le viene de niño.
Reina destacó que Pablo Aguado «es un torerazo porque con dos años de alternativa, ha formado lo que ha formado. No solo el triunfo en Sevilla, sino toda la temporada que lleva. Ha hecho algo fuera de lo normal con ese concepto del toreo, con esas maneras de torear, con ese temple, y con esas características que tiene yo creo que este torero puede evolucionar más. Yo a Pablo hoy por hoy no le veo techo».
Pablo Aguado destaca por su toreo «fuera de lo habitual» en palabras de Tere Baco Sevillano «él torea distinto, emociona, hace que se enganche a los toros gente que no entiende de toros. Que no hace falta entender, solo hay que sentirlo».
La crítica taurina destaca unánimemente el sello personal dentro del puro clasicismo, su temple, lentitud, suavidad y, en general, su naturalidad.
«Pablo Aguado arrastra juventud y eso es muy importante porque la afición al toro se está perdiendo entre los jóvenes. Lo que Pablo está haciendo es algo importante» destacó Reina.
Pablo Aguado tomó la alternativa en 2017 con 26 años de manos de Enrique Ponce. Hijo del ganadero Julio Aguado, torea novillos desde 2012.
Ricardo Reina destacó que en Marchena hay cultura e historia taurina desde hace muchísimos años. «Teníamos un gran club taurino que por desgracia se disolvió y estos actos de premiar a los triunfadores de la Feria de Sevilla lo hacían ellos y nosotros los hemos querido retomar. Es la primera vez que lo hacemos y espero que la gente haya disfrutado y esté a la altura del matador».
También acudió al evento el novillero astigitano Jaime González Ecija, que ha participado en el certamen de promoción de Canal sur llegando a semifinales, y triunfó en el certamen de Sevilla y gracias a esto pudo debutar con picadores el pasado mes de septiembre y participar en el festival del doce de octubre con las mayores figuras del toreo en Sevilla.
«La temporada próxima espero poder actuar en Sevilla de nuevo y a principios de año en enero viajaré a México seguramente. Y la próxima temporada española intentaré participar en el máximo número de festejos» explica Jaime González Ecija.
Además González Ecija valora positivamente el proyecto para recuperar la plaza de toros de su ciudad natal. «Ahora se abre el pliego de condiciones para que se presenten empresas a licitar y aunque se está demorando el proyecto y esperemos que se resuelva pronto. Es el momento de abrir la plaza de Ecija ahora que estamos Angel Jiménez que ha tomado la alternativa y triunfado en Sevilla y yo es el momento de abrir la plaza cuando la afición está despierta».
HISTORIA TAURINA DE MARCHENA
Pedro Ponce de León hermano del Duque de Arcos Luis Cristóbal Ponce de León pasó a la historia por ser uno de los mejores y más famosos de España en el toreo a caballo en 1530.
Forzudo y valiente hasta la exageración, según Mariano de Cavia (Crónica Taurina -1901) Pedro Ponce de León ya alanceaba toros y por ello fue famoso en la España de 1530 y se hizo famoso por ser el mejor y más aplaudido de su época en este precedente del rejoneo. Participaba a menudo en fiestas y circos en tiempos de Carlos V. A la historia del toreo aportó la idea de tapar los ojos a los caballos para que no se espantaran de los toros.
En el XVI nacen los encierros de varas, se transforman en corridas de rejones. Los nobles se ayudaban de peones y escuderos para distraer al toro que echaban mano del capote. Los asistentes del matadero de Sevilla aportaron arte y creatividad a la tarea de conducir ganado, atrayendo la atención de centenares de espectadores para los que se construyeron gradas.
Las lanzas se sustituyen por picadores dándole valor estético a la faena de capote, que servía para llevar el toro al picador. Los nobles, a caballo, tenían el privilegio de matar al toro, pero si no podían, se lo pedían a sus peones.
En Marchena el matadero estuvo hasta el XVIII junto a la fuente de San Antonio donde existió la puerta del Matadero, en la zona de la Fuente o Plaza de la Constitución.
La Plaza Ducal tenía una puerta o arco llamado del Toril por donde entraba el ganado bravo directamente del campo. Esta puerta del toril hoy ha sido convertida en cochera y se situaba justo frente a la calle Pasión que lleva a la Plaza de la Cárcel.
En 1540 el Duque de Arcos paga por carreras y garrochas para la lidia de unos toros que se soltaron en Marchena. En 1549 el Duque de Arcos compra unas garrochas «y otras cosas de sus toros que se lidiaron en Marchena». En 1576 el Duque de Arcos recibe fondos por el daño que sufrieron cuatro toros que se llevaron de Lora para correr en Marchena y se paga un corral en Marchena para encerrar los toros que se corrieron.
En 1600 hay documentos de pago por dos toros que corrió con garrocha (herramienta para guiar el ganado bravo) el Duque de Arcos. En esta época la garrocha se usaba para saltar a los toros en el famoso salto de la garrocha. También se conservan recibos del precio de los balcones y palcos para presenciar tales diversiones en nuestra localidad.
En 1656 en Marchena ya hubo corrida de toros en el Corpus cuando era tradicional contratar encierro de vacas, toros de cuerda, toros de fuego y toros enmaromados que terminaban con capeas improvisadas y el sacrificio de los animales y reparto y venta de carne.
El marchenero ilustrado Gutierre Vaca de Guzmán (Marchena, 1733 – Madrid, 1804) Ministro del Consejo de Castilla fue uno de los primeros ministros españoles en criticar la fiesta de los toros por su crueldad en la obra literaria satírica Los Viajes de Wanton .
Tres grandes ganaderías de toros bravos nacieron en Marchena, la de José Torres Díez de la Cortina, nació en Marchena en 1875 hoy es propiedad de Juan Pedro Domecq con sede en Arenosillos, Salamanca. En 1835 nace en Palmarete la ganadería Torrestrella fundada por Salvador Suárez Ternero, luego vendida a Álvaro Domecq. José Benítez Cubero nace en el cortijo Los Ojuelos en 1825 .
La Plaza Ducal fue la primera plaza de toros de Marchena, tenía una puerta del toril por donde entraban los toros del campo. Hasta 1924 estuvo abierta la Plaza de Santa María con materiales del Palacio Ducal gestionada por Carlos Muñoz tenía 4000 localidades.
