Porqué se celebra el día de los gitanos andaluces el 22 de Noviembre
José Antonio Suárez López
En 1996, el Parlamento Andaluz aprobó la celebración del 22 de noviembre como «Día de los Gitanos Andaluces».
“A veinte y dos días del mes de noviembre de este año (1462) llegaron a la ciudad de Jaén dos condes de la pequeña Egipto, que se llamaban el uno don Tomás y el otro don Martín, con hasta cien personas entre hombres, mujeres y niños…Y como llegaron a la ciudad de Jaén, el señor condestable los recibió muy honorablemente y los mandó aposentar y hacer grandes honras…”
Esta llegada aparece recogida en los Hechos del Condestable Don Miguel Lucas de Iranzo, gobernador de Jaén y primer andaluz que documentadamente acoge el Pueblo Gitano.
«Sabemos que el origen del flamenco está en la Andalucía de hace unos trescientos años, y que ahí había gitanos y herederos de los moriscos cantando folklore andaluz. Creo que hay que reconocer esos tres orígenes, mezclados de forma indisociable» afirma Juan Ramon Lara músico e investigador de Academia del Piaccere, que se dedica a recuperar músicas antiguas.
En el XIX los gitanos de Marchena habían conservado romances, propios de judíos y moriscos. En 1820 Bartolomé José Gallardo, encarcelado en Sevilla, escuchó a Pepe Sánchez y Curro El Moreno, gitanos de Marchena cantando El Romance de Gerineldo y La Condesita, romances propios de la tradición oral de los moriscos y judíos, según se recoge en la obra «El Romancero de la provincia de Sevilla» dirigido por Pedro M. Piñero Ramírez. «El Romancero de Marchena» de Juan Pablo Alcaide confirma la procedencia sefardí de muchos romances conservados en Marchena en los años 80.
PRESTAMOS MUSICALES ENTRE EL FLAMENCOS Y MORISCOS
Músicas que creemos flamencas, tienen un origen anterior. El fandango existía antes del flamenco según el Diccionario de Autoridades de 1735.Pablo Montes, investigador y experto en historia de la música señala que la fiesta del fandango o fiesta del candil «viene de América». «Igualmente la Zambra es un baile morisco que luego se adapta al flamenco» señala Pablo Montes.
La tradición musical andalusí en Marchena enamoró en los años 30 a Aziz Balouch que vino a España buscando la raiz del folclore andalusí y acabó cantando flamenco en la compañía de Pepe Marchena y escribió un libro sobre la teoría árabe en el origen del cante jondo.
«Sufismo y Flamenco tienen mucho en común: un sistema musical que viene de la misma zona, un vocabulario similar, preguntas existenciales» explica Martina Catella, experta e investigadora musical (www.singtheworld.fr) . El qawwali es una tradición musical del sufismo que se inicia en el siglo XIV en lugares santos sufíes de India y Pakistán con similitudes con el flamenco.
En Marchena destacó como gran maestra del sufismo Shams Um Al Fuqara, maestra de Ibn Arabi «La música sufí era una herramienta para curar a la gente, no un divertimento. De hecho Ibn ArabÍ explica que dependiendo del maqam, (escala o rango melódico que se usara) podían curar unos dolores de cabeza, de estómago, etc». No usaban la música como divertimento porque «alejaba de lo divino».
«El sustrato étnico donde se crea el flamenco es abundante en moriscos y gitanos» explica Juan Ramón Lara, investigador y músico de la Academia del Piacere. «La forma del villancico tiene influjo del zéjel (en concreto su mudanza, vuelta y estribillo). Un sustrato de cultura árabe permaneció en nuestra tierra junto a sus pobladores». Otros autores creen que los melismas tipicos de algunos cantes y del flamenco tiene su origen en los cantos andalusíes.
GITANOS EN MARCHENA EN EL XVI
En 1565 Loris Hoeffnagel vino a Marchena con sus instrumentos de dibujo para trazar un grabado de Marchena con los primeros gitanos: el padre, la madre, el mocito y el niño/a pequeño en los brazos de la «mama». Los hombres trabajan el hierro mientras la gitana amamanta. Se reconoce que son gitanos por las herramientas, los fuelles (estos fuelles han seguido siendo usados por los gitanos) y por la rodela que luce la gitana.
Si los gitanos andaluces entraron en Andalucia por Jaen en 1462, primer registro escrito, en Marchena en 1617 encontramos armaos gitanos junto al Santo Entierro y en la procesión de la Soledad de Septiembre llevaba «danzas de gitanos» según explica Vicente Henares en su libro sobre la Historia de la Hermandad de La Soledad.
En 1578 el Ayuntamiento de Marchena contrató para la procesión del Corpus varios grupos de danzas de gitanos de Marchena como Sebastián García, Beltrán Bustamante, Diego Salguero, Francisco Heredia, Baltasar de los Reyes, Alfonso Nicolás Montoya, y María Parla.
RODRIGO PONCE DE LEÓN Y LA LLEGADA DE LOS GITANOS
La Universidad de Sevilla citando a José María de Mena apunta la posibilidad de que los gitanos fueran usados por don Rodrigo Ponce de León como ayudas de campo en sus batallas, primero contra los Guzmanes y luego contra los moros.
La Pragmática de los Reyes Católicos, promulgada en Medina del Campo, en 1499 pedía a los gitanos que dejasen de vagar y se pusieran bajos las órdenes de un señor. “Mandamos a los egipcianos que andan vagando por nuestros reinos y señoríos… que vivan por oficios conocidos… o tomen vivienda de señores a quien sirvan… Si fueren hallados o tomados, sin oficio, sin señores, juntos… que den a cada uno cien azotes”. Por eso los gitanos llegaron a tierras señoriales como Marchena buscando la jurisdicción de un Señor o Duque obedeciendo los Reyes y se bautizaban para no tener problemas.
GITANOS, MORISCOS Y JUDIOS EN LA MARCHENA DEL SIGLO XVI Y XVII
Poco antes, en 1481 unos 8000 judíos de Sevilla vinieron a Marchena y otras tierras del Estado de Arcos huyendo de la Inquisición real y fueron acogido por Rodrigo Ponce de León, entre ellos venían miembros de importantes familias sevillanas, y sabemos que hasta el XVII hubo conversos en Marchena por juicios de la Inquisición.
En 1570 el Duque también trajo a Marchena Moriscos de la sierra de Ronda, tras alcanzar con ellos acuerdos de paz, y muchos fueron bautizados en San Juan. Algunos tuvieron problemas con la Inquisición establecida en Santo Domingo, por conservar sus propias costumbres, lo mismo que sucedía con los judíos y los moriscos. Se conocen los listados de apellidos moriscos que vinieron a Marchena.
«Aquellos lugares con mayor población morisca, son, precisamente, en los que se asentó el mayor número de gitanos» afirma Blas Infante en una de sus investigaciones sobre el origen del flamenco citando Marchena entre esos lugares. En 1950 Antonio Mairena y Ricardo Molina afirman que los gitanos crearon el flamenco integrando «las tradiciones musicales que encontraron todavía vivas en la abundante población morisca”.
Justo cuando se fueron los moriscos y judíos, llegaron los gitanos que ocuparon sus oficios y aprendieron sus tradiciones culturales. «Cuando los gitanos llegaron a España se encontraron con una gran riqueza musical» señala Pablo Montes guitarrista clásico y recién graduado en Historia de la Música, por la Universidad de Granada.
La música y tradición andalusí -como también pasó con la judía- se eliminó de España durante siglos, aunque se conservó en el Magreb. «De hecho se eliminó hasta tal punto de que el laúd estaba mal visto por ser instrumento árabe y por eso la vihuela se convierte en el instrumento principal y de ahí evoluciona la guitarra».